Ingenieros Ulima traspasan fronteras con aplicación de nutrición

Con pocas certezas, pero con entusiasmo y determinación, Piero Linares y Ulises Olave renunciaron a sus empleos fijos para emprender un negocio en el año 2019. Se entregaron a darle forma, pulirlo y mejorarlo, y hoy Fitia es una aplicación con planes nutricionales inteligentes para perder grasa o ganar músculo, con más de 8000 recetas personalizadas y con 800 000 usuarios activos al mes, y, por segundo año consecutivo, ocupa un lugar en el ranking de los 100 emprendimientos más exitosos del Perú.

Piero es ingeniero industrial y Ulises, ingeniero de sistemas, ambos graduados en la Universidad de Lima. Ahora que su aplicación se usa en varios países latinoamericanos, planean su expansión a Estados Unidos, Canadá, Australia y Reino Unido.

¿Cómo se unieron para crear Fitia?
Piero: Ulises y yo nos conocemos desde los 11 o 12 años. Hemos estudiado juntos en el colegio y los dos ingresamos a la Universidad de Lima, yo estudié Ingeniería Industrial y él, Ingeniería de Sistemas. Somos muy buenos amigos. Por mi parte, desde que salí del colegio, siempre he estado involucrado en el mundo del fitness y tenía un particular interés por la nutrición; incluso llevé una especialización en el tema. Después de acabar mi carrera, me enfoqué en la parte de finanzas, mientras que Ulises se especializó en desarrollo de software. Un día, me propuso crear una aplicación que calculara las calorías, los nutrientes y la selección de alimentos que una persona necesita. La idea era que un algoritmo sugiera qué desayunar, qué almorzar y qué cenar, con el fin de alcanzar objetivos específicos, como ganar masa muscular o perder grasa. Así fue como empezamos este emprendimiento juntos.

¿Trabajaban en ese momento?
Ulises: Sí, cada uno en su especialidad, pero decidimos renunciar y lanzarnos a la piscina. Comenzamos en Perú y, gracias a la respuesta del público, nos solicitaron expandir la aplicación a Chile, Colombia y México.

¿Cómo fue la parte del desarrollo de la aplicación? 
Ulises: Inicialmente, me dediqué a desarrollar un MVP (una versión básica del producto para validar su aceptación en el mercado) para iOS. No tenía tantas funcionalidades como la versión actual, pero a la gente le gustó, y decidimos seguir adelante y hacer la versión para Android.

¿Cómo era la aplicación al inicio y luego cómo evolucionó? 
Ulises: Al inicio brindábamos recomendaciones de comidas. Los usuarios ingresaban sus datos, como edad, sexo y peso, y la aplicación les sugería comidas. Era muy sencillo. Por ejemplo, te sugería "come arroz con pollo y palta". En ese momento, no teníamos una base de datos; ahora, contamos con una que abarca casi todos los países de Latinoamérica, lo que facilita la búsqueda de productos locales. Tampoco teníamos recetas. En ese periodo se trataba de probar las recomendaciones que brindábamos y asegurarnos de que fueran precisas para que las personas alcanzaran sus objetivos. A partir de ahí, desarrollamos nuevas funcionalidades hasta llegar a lo que tenemos actualmente.

Piero: Es muy sencillo utilizarla. Ahora, igualmente, ingresas ciertos datos para que el algoritmo calcule tus calorías objetivo y los macronutrientes que requieres. También te pedirá que selecciones los alimentos que prefieres, ya que Fitia no recomienda comidas con alimentos que no has seleccionado. Consideramos que la preferencia alimentaria es crucial para que el plan de alimentación sea sostenible. Luego, te ofrece un plan de comidas automatizado. Además, lo bueno es que las opciones son casi ilimitadas. Los usuarios reciben recomendaciones para cada comida, ya sea desayuno, almuerzo o cena. Si no les gusta una opción, la pueden reemplazar por otra opción. Además, si en el almuerzo hay un ingrediente que no le gusta o no quiere cocinarlo o no tiene tiempo para hacerlo, puede acceder a cualquier otro alimento en nuestra base de datos. Incluso si compraste algo en un supermercado, puedes escanear el código de barras y la información nutricional aparecerá automáticamente en la aplicación. Lo mismo ocurre en supermercados de México, Colombia, Chile y en la mayoría de países donde estamos presentes. Hay menús variados según el país.

¿Varían también los nombres de los ingredientes, según como se les llama en cada país?
Ulises: Sí, eso lo implementamos hace bastante tiempo porque es muy importante. Si en México se utiliza el término aguacate y en otros lugares se usa palta, se puede generar confusiones o molestias. Por eso, las sugerencias en la aplicación varían de acuerdo con el país y utilizamos los nombres de los alimentos de acuerdo con la terminología y las costumbres de cada lugar.

¿Quién los ha asesorado para hacer esta aplicación?
Piero: La iniciamos solo los dos, pero ahora ya contamos con un equipo de diecisiete personas que incluye nutricionistas, personal de operaciones y de marketing. Hemos experimentado un crecimiento relativamente rápido, pero también queremos enfocarnos en mantener un equipo lo más compacto posible. 

¿Cómo les va aquí y en los diferentes países?
Piero: Nos va muy bien. Comenzamos en el 2019, antes de la pandemia, y en el 2021 ingresamos a Y Combinator, la aceleradora de startups más prestigiosa del mundo. Entrar a este programa de aceleración es muy difícil. La tasa de aceptación es inferior al 2 %, con un promedio de 1,5 %. Además, es más complicado ingresar para una startup latinoamericana, ya que la mayoría de las startups ahí son de Estados Unidos. Gracias a esa oportunidad, levantamos una ronda de financiamiento semilla con inversores estadounidenses, lo que nos permitió crecer aún más rápido. Ahora estamos en quince países de habla hispana, y nuestros principales países de operaciones son México, España, Chile, Colombia, Argentina y Perú. Aunque Perú fue nuestro principal país en un momento, ahora ocupa el sexto lugar en términos de operaciones.

¿Las personas tienen alguna manera de medir el resultado que obtienen después de usar la aplicación?
Piero: Hay varias maneras. A través del peso, pero también de la grasa corporal, y tomamos en cuenta el feedback de los usuarios. Muchos nos escriben para agradecernos porque han logrado sus objetivos de pérdida de grasa o de ganancia de masa muscular. Además, recibimos mensajes muy especiales en los que nos dicen que han aprendido a comer mejor. Esto es muy importante para las personas porque les permite ser autosuficientes, no depender de algo externo. Aprender a comer de manera saludable te convierte en el dueño de tu alimentación, según lo que quieras lograr. Este mensaje especial de los usuarios es muy valioso para nosotros. Además, tenemos analytics y monitoreamos qué funciones son las que más les gustan a los usuarios.

¿Por qué creen que les va tan bien, sobre todo si se considera que hay muchas aplicaciones de este tipo?
Piero: Creo que la mayoría de aplicaciones no ofrecen el grado de personalización que nosotros proporcionamos. No llegan al detalle de las calorías y macronutrientes que uno necesita, y tampoco calculan con la misma precisión. Nuestras sugerencias de comidas se adaptan a esos requerimientos específicos. El algoritmo que hemos desarrollado es el corazón de nuestra aplicación.

Ulises: Además, contamos con una base de datos que, hasta el momento, ninguna otra aplicación en América Latina posee. Esto nos otorga una ventaja significativa, ya que la mayoría de las aplicaciones similares provienen de los Estados Unidos. 

¿Cómo hacen para difundir esta aplicación si se tiene en cuenta la cantidad de aplicaciones de este tipo en las tiendas? 
Ulises: Comenzamos principalmente a través de Instagram, con la publicación de contenido relacionado con fitness y nutrición. Construimos una base de seguidores en esa plataforma y fue allí donde inicialmente difundimos nuestra aplicación. Ahora, dentro de la propia aplicación hemos incorporado algunas herramientas interesantes para captar nuevos usuarios. Por ejemplo, si alcanzas tu peso objetivo, hay un botón que te permite compartirlo en redes sociales. Al hacer clic en este botón, el logro se publica como una historia en Instagram, lo que motiva que otras personas lo vean y, a su vez, se genere descargas. Además, estamos muy bien valorados en las tiendas de aplicaciones, tanto en Google Play como en Apple Store. Creemos que esta es una de las aplicaciones de nutrición con mejor puntaje, con una calificación de 4,8 a 4,9 de rating. Esto influye mucho en la decisión final de los usuarios a la hora de elegir qué aplicaciones descargar.

Piero: También contamos con un equipo de marketing que se encarga de la publicidad en diversos medios pagados. Y estamos desarrollando otras funciones, como programas de referidos para que los usuarios recomienden la aplicación, lo que nos ayudará a expandir nuestra base de clientes. Además, ofrecemos una versión pagada y otra no pagada. Nuestro modelo de negocio es prémium. Esto significa que puedes descargar y utilizar la aplicación de manera gratuita, pero hay funciones específicas que son de pago y para eso necesitas una suscripción. 

¿Cuántos usuarios tienen hasta ahora? 
Piero: Tenemos más de 800 000 usuarios activos al mes. Esta cifra no incluye solo las descargas de la aplicación, sino a los usuarios activos. 

Ahora les va muy bien, pero ustedes renunciaron a sus trabajos cuando esto comenzó. ¿Cómo tenían la certeza de que les iría bien? 
Piero: Por mi parte, no sé si había una certeza. En mi trabajo estaba muy feliz, hacía lo que me gustaba y seguía una línea de carrera. El ambiente laboral era excelente. Sin embargo, siempre tuve el deseo de crear algo por mi cuenta. Cuando trabajamos en grandes empresas, las oportunidades de crear cosas nuevas no siempre se presentan. Había leído mucho material de Y Combinator y startups, pero lanzarme a la piscina sin tener algo seguro fue probablemente la decisión más difícil de mi vida. Sin embargo, hoy creo que fue también la mejor decisión. 

Ulises: Yo también quería emprender y hacer algo por mi cuenta. Tampoco tenía la certeza de que esto fuera a funcionar, pero quería intentarlo. Quería lanzar el MVP y ver qué sucedía. Afortunadamente, las cosas se dieron a nuestro favor. No sucedió de la noche a la mañana, nos costó mucho trabajo y dedicación. Nos reuníamos todos los días para planificar y, al final, todo ese esfuerzo da sus frutos. 

¿Dónde trabajaban antes de emprender? 
Piero: Yo terminé la Universidad en el verano del 2016 y comencé a trabajar como practicante en el Grupo Breca, que es uno de los conglomerados empresariales más grandes del país y cuenta con empresas en diversos sectores. Yo estaba en el centro corporativo, era un nexo entre las unidades de negocio y los accionistas, y me dedicaba básicamente a las finanzas y el desarrollo de negocios. La última parte del tiempo que estuve ahí, me involucré en varias fusiones y adquisiciones, así que me tocaba valorizar empresas y analizar compras y ventas. Participé en varias transacciones, como la de las cadenas Marriott aquí en el Perú y la venta de una unidad de negocio agrícola. Permanecí en el Grupo Breca casi cuatro años, hasta que Ulises me contactó y decidí renunciar.

Ulises: Mientras estaba en la Universidad, comencé a trabajar como practicante en el BBVA, donde principalmente me dedicaba a gestionar bases de datos. Luego ingresé a Telefónica como trainee y, cuando terminé la Universidad, trabajé como analista en Telefónica Empresas. Finalmente, asumí el rol de product manager para algunos productos que se vendían a instituciones financieras.

¿Qué opinan de haber sido listados entre los 100 emprendimientos más exitosos según Forbes
Piero: Nos sentimos emocionados. También el año pasado, cuando fuimos incluidos en la lista. Todo esto nos parece muy bueno, pero nos encantaría ver a más startups peruanas no solo en el top de Latinoamérica, sino en el del mundo. Las startups peruanas tenemos un gran potencial y debemos generar un impacto no solo regional, sino también global. En nuestro caso, nos preparamos para expandirnos a Estados Unidos, Canadá, Australia y Reino Unido en los próximos meses. Esto representa un gran salto en el consumo digital y las suscripciones. Estos mercados son mucho más grandes que toda Latinoamérica. Sobre el ranking de Forbes, estamos contentos de recibir este tipo de noticias, como también nos enorgullece haber sido incluidos en listas cerradas de Y Combinator.

¿Cómo les fue en su época de estudiantes en la Universidad de Lima? 
Ulises: Trabajamos a una cuadra y media de distancia y siempre recordamos con cariño a la Universidad. Observamos cómo ha cambiado a lo largo de los años, desde que nos graduamos. Eso me da mucho gusto. Mi experiencia ahí fue bastante bonita, aprendí muchas cosas que utilizamos en nuestro día a día. Hace pocos meses regresamos para asistir a un evento al que nos invitaron y notamos un gran progreso, me da mucha alegría.

Piero: Al estudiar Ingeniería Industrial, como es una carrera tan amplia, adquirí conocimientos que me han servido para todo lo que he hecho desde que me gradué. Trabajé en finanzas gracias a la base que recibí en la Ulima y después tomé cursos electivos específicos que me ayudaron a especializarme en esa área. Posteriormente, me adentré en el mundo de las startups y el emprendimiento, donde también comprobé que los conocimientos que adquirí en la Universidad fueron fundamentales. Por eso, considero que la etapa final de la carrera fue excelente, porque seguí cursos electivos que yo quería. Además, como dice Ulises, todo lo que están haciendo en la Universidad es excelente. No solo han mejorado la infraestructura, sino que siempre actualizan las carreras y sus planes de estudio. En Fitia, por ejemplo, contamos con colaboradores que son jefes de práctica en la Universidad de Lima, en la carrera de Ingeniería de Sistemas. Hemos observado cómo la malla curricular ha evolucionado con el tiempo y ha incluido nuevas tecnologías.