Emprendimiento familiar

Luis, Giancarlo y Pamela Velarde estudiaron en la Universidad de Lima. Luis, el papá, es graduado de Ingeniería Industrial. Su hijo Giancarlo siguió sus pasos y Pamela optó por Arquitectura. El año pasado, los tres decidieron iniciar una empresa familiar dedicada al diseño arquitectónico, el diseño interior y la construcción.

¿Cómo se animaron a empezar este emprendimiento?

Luis: Después de trabajar 36 años para el mundo corporativo, decidí optar por la jubilación anticipada y disfrutar de nuevas experiencias. Soy muy activo, así que decidí convocar a mis hijos para formar esta empresa y, en julio del año pasado, nos sentamos los tres frente a la notaría y constituimos Spazia Arquitectura.

Pamela: Es algo que surgió como una idea hace varios años y recién se pudo llevar a la realidad el año pasado, gracias a que mi papá se jubiló [risas]. Yo ya había trabajado en dos empresas, donde aprendí bastante sobre el ritmo de una construcción y otros temas, así que me animé por lanzarme a este reto familiar y puedo decir que es muy motivador.

¿Cómo se han distribuido las responsabilidades?

Luis: Pamela estudió Arquitectura, así que ella se encarga del diseño. Giancarlo revisa los presupuestos, les da forma, ve los formatos, define cómo debemos presentar el proyecto a los clientes y si estamos incluyendo el margen adecuado. Yo me ocupo de los trámites, voy al banco, preparo las cuentas y lidio con el contador.

¿Qué tal les ha ido hasta el momento?

Pamela: El año pasado arrancamos con un primer proyecto: la remodelación de la sala y comedor de la mamá de nuestro seleccionado Edison “el Orejas” Flores. Fue un regalo sorpresa que el jugador le obsequió a su mamá. Mi papá se encargó de la supervisión de la obra y el diseño fue aprobado al cien por ciento por Edison. Actualmente tenemos otro proyecto con el diseño aprobado, es la remodelación de un par de pisos de oficinas, pero nos hemos detenido por los inconvenientes de la cuarentena. Mientras tanto, estoy a la búsqueda de clientes. Voy avanzando en el área de marketing y redes sociales, preparo videos que se conectan con las personas, con la idea de generar una imagen de confianza. Mi objetivo es construir una empresa sólida, un lugar donde la gente quiera trabajar y desarrollar sus habilidades.

¿Podrían comentar cuál es su trayectoria profesional?

Luis: Yo tengo 36 años de experiencia profesional y, básicamente, he trabajado para 2 grandes empresas. Una de ellas es 3M Perú, donde empecé en producción y luego en logística. Tuve la oportunidad de encargarme del proyecto de construcción de oficinas en San Isidro y de los almacenes ubicados en Chorrillos. Luego trabajé en Claro, también en logística. Comencé en el área de compras y continué vinculado a almacenes y distribución. Allí también tuve la oportunidad de encargarme del proyecto de construcción de un almacén. Fueron experiencias muy enriquecedoras.

Giancarlo: Yo estudié en la Universidad del 2006 al 2011. Empecé practicando en Duke Energy Perú, empresa con plantas de generación eléctrica. Tengo casi nueve años de experiencia en el sector energético y casi toda mi experiencia se ubica en el área de compras y la cadena de abastecimiento, o supply chain management. Desde hace un año trabajo en el Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional (COES), otra empresa del sector de energía, donde soy responsable de logística.

Pamela: Yo terminé la Universidad en el 2017 y entré a trabajar en una inmobiliaria, en supervisión de obra. Aprendí mucho, porque cuando empiezas a diseñar no piensas en cuánto tiempo te va a tomar o cuán complicado va a ser ejecutar el proyecto con el dinero presupuestado, eso es algo que aprendes con la práctica. En este momento, mi mundo gira en torno a la empresa.

¿Cuán complicado les resulta emprender, sobre todo considerando el contexto en que vivimos?

Giancarlo: Creo que emprender nos une como familia. Obviamente, no dejamos de tener diferentes puntos de vista y los discutimos para sacar el proyecto adelante. Pero lo cierto es que en este momento mi papá y mi hermana están más dedicados a la empresa, ya que mi prioridad es mi trabajo actual. Recién estamos empezando y nos encontramos muy entusiasmados con lo que vayamos a lograr más adelante.

Luis: Mi sueño es que este proyecto crezca y que sean mis hijos quienes tomen las riendas. La construcción siempre me llamó la atención y, si puedo seguir ligado a esto que me gusta, a través de este emprendimiento con mis hijos, fantástico. Pero siempre es un desafío. Los trámites son, en sí mismos, un reto. Mi objetivo es marcar el camino para mis hijos.

Pamela, ¿cómo fue para ti tomar la decisión de dejar tu trabajo para dedicarte a este emprendimiento?

Pamela: Dejar mi trabajo para enfocarme al cien por ciento a mi empresa ha sido mi mayor reto. Cuando entras a una organización ya constituida, formada, grande, como en las que he trabajado antes, es más fácil encontrar tu camino. Pero cuando formas una empresa desde cero, tienes mil y un obstáculos que no puedes ni prever. Además, todo depende de uno mismo y, si algo falla, es nuestra responsabilidad. Pero estaba segura de que este era el momento ideal para emprender.

Giancarlo: Para mí, el mayor reto es encontrar el tiempo necesario para apoyar a la empresa y no dejarlos solos en ningún momento. Por otro lado, Pamela es mi hermana menor y verla trabajar en sus diseños y emprender me hace sentir muy orgulloso. Ella es el motor de esta empresa.

¿Qué recuerdos guardan de su etapa universitaria?

Giancarlo: A mí me encantó la etapa universitaria. Tengo muy buenos amigos de aquella época y lo que más valoro es la base que me dio la Universidad de Lima. Además, en mi trabajo tengo oportunidad de ver cómo destaca la calidad de los egresados Ulima. Los cursos que llevé me sirvieron para abrir la mente y me dieron una base sólida para enfrentar el mundo real. La educación que he recibido ha sido de lo mejor para mi vida laboral y me ha permitido crecer.

Pamela: Tengo muy bonitos recuerdos de la Universidad. Yo pensaba estudiar Administración, pero luego me decidí por Arquitectura, cuando la Carrera apenas tenía dos años de creada en la Universidad de Lima. No éramos muchos, así que conozco a todos desde la primera hasta la quinta promoción. Fue una linda época.

Luis: Yo ingresé a la Universidad de Lima en el año 76 y egresé en el 82-1. Ahora estoy motivado por la juventud y el ímpetu de mis hijos y he decidido titularme, porque hasta actualmente tengo el grado de bachiller. Acabo de presentar mi trabajo de suficiencia y estoy esperando una respuesta. Por otro lado, mi hija menor está terminando el colegio y creo que va a optar por Comunicación, también en la Ulima, así que tal vez seamos una familia Ulima completa.