Universidad de Lima

“Gobierno corporativo en mercados emergentes” fue el tema de la conferencia realizada por el Centro de Gobierno Corporativo de la Universidad de Lima (CGCUL) y la Escuela de Posgrado, que se llevó a cabo el 27 de junio en el Aula Magna A.

El vicerrector Jaime León Ferreyra abrió el evento recordando que “no hay que trabajar en buenas prácticas solo cuando la empresa es grande, sino que debemos hacerlo a todo nivel”. Con ese propósito, aseguró, fue creado el CGCUL, que formará a los futuros profesionales de nuestro país en buenas prácticas corporativas.

El corresponsal de The Economist Lucien Chauvin, principal expositor de la charla, reconoció que es un momento muy oportuno para hablar de estos temas en Latinoamérica si tomamos en cuenta los recientes escándalos de corrupción que han sacudido la región. Para él, el gobierno corporativo se refiere a “las estructuras y procesos con los que se controla y dirige una empresa”, que se pueden dividir en cinco elementos fundamentales: compromiso, estructuras y funcionamiento del directorio, procedimientos y sistemas de control, transparencia, y difusión de la información y derechos de los accionistas. El experto aseguró que optimizando cada uno de estos aspectos se es más eficiente, se atrae capital y, sobre todo, se evita la corrupción, lo que le permitiría a la región tener empresas que sean sostenibles a largo plazo.

Tras la exposición, se formó una mesa de discusión que tuvo como panelistas al director del Banco Santander del Perú, Javier Arroyo; al docente de la Maestría en Derecho Empresarial y socio del Área Legal y Fiscal de PwC, Miguel Puga; al intendente de la Superintendencia de Bancas, Seguros y AFP, Héctor Cusman; y a la gerente legal de la Bolsa de Valores de Lima y Cavali, Magaly Martínez. Ellos discutieron bajo la moderación de la docente e investigadora Julianna Ramírez.

Para Arroyo, el concepto de lo que es correcto ha ido cambiando en la sociedad, y lo mismo ocurre en las empresas, pues en el pasado el gobierno corporativo era algo que no se hubiera tomado en cuenta. En esa línea, Cusman resaltó la importancia de la permanente actualización en buenas prácticas, ya que “los mercados y sus dinámicas cambian y, por lo tanto, los problemas de las empresas también”. Luego, Martínez aseguró que el inversionista de hoy se ha empoderado y solo está dispuesto a invertir en empresas que cuiden su reputación, no solo en el papel sino además con sus acciones. Por último, Puga recordó que el gobierno corporativo puede ser aplicado a diversos tipos de organizaciones, como universidades, pequeñas y medianas empresas o incluso instituciones del Estado. “La transparencia a todo nivel genera confianza en todos los actores de la sociedad, y eso incrementa el valor de la reputación de nuestras instituciones”, sentenció.