Ya desde la Antigüedad, escritores como Virgilio, en sus Geórgicas, describieron, solo como los grandes poetas son capaces, muertes masivas producidas por agentes patógenos desconocidos en aquellos lejanos siglos. En este libro, aparece un pasaje dramático y conmovedor en torno de una enfermedad del ganado. Esta arrasaba con vacunos, equinos y caprinos sin distinción alguna: el temible carbunco o ántrax, que también puede matar seres humanos en gran cantidad.