El lunes 23 de julio, la Facultad de Comunicación y el Fondo Editorial de la Universidad de Lima presentaron Imitación de la vida. Crónicas de cine, en la XVII Feria Internacional del Libro (FIL) de Lima. El autor del libro y profesor de la Facultad de Comunicación, Isaac Chacho León Frías, presentó esta publicación en compañía de otros dos amantes del cine y grandes amigos: el crítico Fernando Vivas y el también profesor de la Facultad de Comunicación, Giancarlo Carbone.
Imitación de la vida reúne más de trescientas notas periodísticas del autor, quien en la década de los noventa estuvo a cargo de la columna El Cine en Casa, de la revista TV+ del diario El Comercio. Aquel fue un espacio que llamó la atención de un público interesado en las películas comentadas —muchos de ellos llegaron hasta la FIL para saludar a León y adquirir la publicación—, las semblanzas de actores o los géneros y períodos del siglo XX.
Giancarlo Carbone abrió los comentarios sobre esta obra que se asemeja a una guía de películas, personajes y artistas del cine, además de emprender un recorrido por musicales, dramas, westerns, comedias, policiales, filmes épicos, de animación y de terror. También se incluye a realizadores que hoy son ya leyendas, como Hitchcock, De Palma, Coppola, Scorsese, Allen, Hawks o Eastwood, por mencionar algunos. Para Carbone este volumen, que finaliza con un prolijo índice de las películas comentadas, plasma un ejercicio muy particular para Chacho León, quien, acostumbrado a las críticas extensas, hace gala en estos artículos de una envidiable capacidad de síntesis, con estructuras que se concentran en lo fundamental e imprescindible.
Luego Fernando Vivas recordó una discusión que aún continúa con el autor del libro, y que se vincula con la opinión de ambos acerca del ejercicio de ver películas en un televisor. León, a diferencia del primero, siempre defendió, incluso en estas columnas dedicadas a las películas que se transmitían en la señal abierta, que el formato de la televisión limita de muchas maneras la capacidad expresiva del cine, que ha sido creado para disfrutarse en la sala. Aunque, antes de finalizar, admitió que eso ha cambiado con las transformaciones en la tecnología, ya que los televisores modernos se han convertido en un medio casi ideal, aunque nunca igualable a la pantalla gigante, para dejarse llevar por esta absorbente y apasionada forma de imitar la vida.