La Universidad de Lima lamenta las muertes del artista plástico Fernando de Szyszlo Valdelomar y de su esposa, Liliana Yábar, ocurridas este lunes 9 de octubre. Esta Casa de Estudios tuvo el honor de tenerlo como su profesor honorario; además, alberga una de sus obras murales: se trata de Sol negro, mural de mosaico que Szyszlo preparó en 1997 para el frontis del Auditorio Central de nuestro campus. Esta obra está basada en una pintura suya del mismo nombre, de la serie Mar de Lurín.
Sobre el mural Sol negro, informó la revista Noticias de la Universidad de Lima, en su edición de noviembre de 1997:
“En el ala derecha del auditorio principal, ubicada estratégicamente a la vista de todos los que transitan dentro y fuera de nuestro campus, una hermosa imagen nos remite al antiguo Perú. Es el mural diseñado por Fernando de Szyszlo, el pintor más reconocido en el país”.
Szyszlo fue una de las figuras más importantes del arte abstracto latinoamericano. Nació en el distrito limeño de Barranco el 5 de julio de 1925. Sus padres fueron Vitold de Szyszlo, físico polaco radicado en el Perú, y María Valdelomar, hermana del escritor Abraham Valdelomar. Estudió en el Colegio de la Inmaculada y en 1944 comenzó la carrera de Arquitectura en la Universidad Nacional de Ingeniería, que dejaría para seguir su vocación y estudiar Artes Plásticas en la Pontificia Universidad Católica del Perú, con el maestro Adolfo Winternitz. Su estilo hace abstracción a partir del arte precolombino, para crear una estética moderna latinoamericana.
Fernando de Szyszlo recibió la Orden del Sol del Perú en el grado de Gran Cruz en 2011, como reconocimiento a su destacada trayectoria. Sus obras pueden apreciarse en el Museo de Arte Moderno de España, The Guggenheim Museum de Nueva York, la Universidad de Essex, el Museo de Arte de Lima, entre otras instituciones. Asimismo, La vida sin dueño, su libro de memorias, se publicó este año.
Por otro lado, recordemos la edición 21 de la revista Lienzo de la Universidad de Lima, que se publicó en el 2000 para rendir homenaje a Fernando de Szyszlo en conmemoración de sus 75 años de vida. Colaboraron entonces Silvio de Ferrari, Zenón Depaz Toledo, Isaac León Frías, Jorge Valenzuela, Julio Hevia y nuestro actual rector, Óscar Quezada, entre otros intelectuales.
En ese número, Szyszlo publicó el artículo “Una manera de vivir”, en el cual dijo:
“Ser artista es tener una compulsión incontenible de expresar. Tiene, pues, poco que ver con un oficio de ganarse la vida; es, tiene que ser, una manera de vivir. Porque la obra no es sino uno de esos espejos borgianos que implacablemente reproduce lo que realmente ponemos al frente. Desgraciada o felizmente, no hay posibilidad ni de engaño ni de subterfugio… Esa búsqueda me ha dado las herramientas para descubrirme a mí mismo, para explorar mi propio interior y encontrar y reconocer mis tradiciones y mi herencia; me ha empujado a la búsqueda de mi propia imagen, de mi propio lenguaje que, si es finalmente honesto, será la imagen del lenguaje del grupo humano al que pertenezco”.
