Bertha Zúñiga, economista de la Universidad de Lima, viene de participar activamente en el II Encuentro de Jóvenes Líderes Iberoamericanos, en el que afianzó su compromiso de proponer proyectos e ideas que fomenten el progreso en el Perú y toda Iberoamérica. Esta misión llena de fe por el futuro también es asumida por ella en Asfinsa, una consultora dedicada a la asesoría y a los negocios financieros en la que se desempeña como jefa de Estudios Económicos y Sociales.
Nuevamente, fuiste seleccionada para intervenir en un encuentro de líderes respaldado por la Fundación Carolina.
Primero fui escogida en el 2009 por el Programa de Jóvenes Líderes, en el que participan unas dos o tres personas por país de un total aproximado de cincuenta seleccionados por año. Ahora, en este 2012, la Fundación Carolina decidió juntar a los becarios de las distintas diez ediciones en Salvador de Bahía, Brasil, con el objetivo de consolidar esta red y afianzar una conciencia generacional a nivel iberoamericano. La intención es que fortalezcamos los vínculos entre los países vecinos. Asimismo, los organizadores querían que fuéramos más allá mediante el desarrollo de proyectos de innovación y emprendimiento, y que generáramos un networking que apunte al futuro.
También eres miembro de Conexión Iberoamérica, una asociación creada por personas que se han desempeñado en los Programas de Jóvenes Líderes del 2008 y el 2009.
En Conexión Iberoamérica, soy la coordinadora del Perú junto a una amiga. Esta asociación tiene como misión impulsar, por iniciativa de sus propios miembros, el proceso de integración iberoamericano, preparar a futuros líderes y crear una red interdisciplinar de jóvenes líderes de esta región.
Tu formación es la de economista. ¿Por qué elegiste esta carrera?
Desde el colegio supe que quería especializarme en economía y desarrollo. Siempre me han gustado los números, y temas como el tipo de cambio o las remesas de las reservas internacionales me interesan. Además, tanto mi papá como mi mamá son economistas, así que la influencia familiar está ahí, aunque casi nunca hablamos de esta especialidad en la casa. Un aspecto que me entusiasma de esta disciplina es que mediante ella se pueden plantear medidas que apunten a contribuir con el desarrollo y el cambio de un país.
¿Qué valores agregados destacas de la enseñanza que te brindó la Universidad de Lima?
Me gustó mucho que, además de las clases que se refieren estrictamente a la economía, se dicten cursos que ofrecen todas las herramientas relacionadas al ámbito de la administración, un mundo que me fascina, pues me interesa cómo se comportan las personas, cuáles son sus motivaciones o las cuestiones referidas al manejo administrativo. Sin embargo, estos aspectos hay que complementarlos con informaciones o con la parte de la data dura sobre lo que está pasando en un entorno determinado, pues son factores que influyen en la toma de decisiones.
Actualmente, además, trabajas en la consultora Asfinsa. ¿Qué resaltas de esta experiencia?
Se trata de una empresa familiar creada hace veintidós años en la que brindamos diversos servicios: efectuamos estudios de inversión, realizamos distintos tipos de investigación sobre la situación macroeconómica del país con el fin de proyectar el comportamiento de las variables más significativas que rigen nuestra economía, brindamos asesorías a nuestros clientes, entre otras tareas. Asfinsa ha trabajado con organismos nacionales como ProInversión u Osiptel, e internacionales como el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo. En estos momentos soy la jefa de Estudios Económicos y Sociales. Siento que es un paso en mi carrera ya que quería tomar un poco más de liderazgo en proyectos de estas características que, luego, podrían traducirse en políticas públicas. Creo que las personas que se dedican a la consultoría son, en gran parte, las mejor preparadas para formular políticas públicas, ya que cuentan con las herramientas y el know how.
También eres parte de Coherencia. ¿Cuáles son los objetivos de esta organización?
Coherencia es un espacio político-pedagógico, donde aprendemos, pensamos y discutimos sobre los problemas y las posibilidades de nuestro país. A esta organización pertenecemos un grupo de jóvenes que hacemos política. Queremos ser parte del cambio. No podemos cerrarnos y decir simplemente no a este tema.
