Universidad de Lima

La final del Torneo de Debate "Divergencias" 2023-1, organizado por el Programa de Estudios Generales de la Universidad de Lima, se llevó a cabo el 30 de junio. Este encuentro fue la cuarta fase de la competición, en la que participaron los dos equipos finalistas, integrados por estudiantes de los dos primeros ciclos lectivos. El torneo, a lo largo de dos talleres de capacitación y cuatro etapas de competencia, tuvo como finalidad brindar a nuestros estudiantes un espacio para el desarrollo de habilidades de oratoria, comunicación y argumentación, y el análisis de temas coyunturales de interés mundial.

El jurado estuvo conformado por los docentes Alonso Rabí y Lisseth Ramos. El encuentro tuvo lugar en el Auditorio O de nuestro campus. Las palabras iniciales estuvieron a cargo de Fernando Hoyos, director del Programa de Estudios Generales, quien destacó la relevancia y la vigencia del torneo: 

“Estamos convencidos de que esta actividad nos permite fortalecer una competencia transversal a todas las carreras, la comunicación. En ese sentido, este tradicional Torneo de Debate es una actividad que permite a los participantes, que hayan llegado a la etapa final o no, llevarse una experiencia de vida muy útil en su formación. Felicito a los dos equipos finalistas, ambos ya son ganadores”.

El tema del debate giró en torno a la continuidad o suspensión de las investigaciones en el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) y sus implicancias en cuanto a riesgos como la desinformación y los ciberataques. El equipo a favor del cese momentáneo de las investigaciones en IA fue integrado por los alumnos Andrea León, Piero Dávalos, Andrea Eguía y David Pacheco. El grupo en contra estuvo conformado por Sebastián Cruz, María Fernanda Castro, Dayana Rojas y Belén Gonzales.

Durante la discusión, ambos equipos debatieron sobre la posibilidad de distinguir entre lo que es generado por una IA o lo que es creado por un humano. Asimismo, se intercambiaron puntos de vista sobre los desafíos y problemas que la IA podría causar en los campos de la investigación académica, la ética y los valores, así como sus riesgos a largo plazo. De este modo, los estudiantes ahondaron en la demanda de más profesionales especialistas en ciberseguridad y en la necesidad de plantear un marco ético que regule el ámbito de acción de estas nuevas tecnologías.

Otros temas destacados fueron la preocupación por la preservación de la autenticidad, la automatización del trabajo, y la naturaleza y el combate de los ciberataques. El grupo en contra argumentó que, de detener las investigaciones en IA, se pausaría el desarrollo de la ciberseguridad. En cambio, el grupo a favor, señaló que la IA es una fuente inagotable de fakenews y que es urgente luchar contra la desinformación.

El debate también alcanzó el terreno de la labor e influencia de la IA en la salud, en la industria, en el sector energético, en la privacidad de datos, en el comportamiento algorítmico, en el futuro de la empleabilidad y en el crecimiento económico. Finalmente, tras la deliberación del jurado y el voto del público asistente, el equipo ganador fue el grupo que se posicionó a favor de la pausa en la investigación en la inteligencia artificial.