Tras un proceso de selección de tres meses, la prestigiosa guía Latin Lawyer entregó el premio Women in Law a Liliana Espinosa Reboa, abogada por la Universidad de Lima, magíster en Derecho Corporativo por New York University y socia del Estudio Echecopar, donde es líder del Área de Fusiones y Adquisiciones. Su trayectoria y sus logros profesionales, así como los votos y la opinión de los suscriptores de esa revista, fueron determinantes para otorgar esta distinción a nuestra graduada.
¿Cómo te sientes de haber recibido el premio Women in Law de la guía legal Latin Lawyer?
Latin Lawyer reconoce a las mujeres abogadas destacadas en Latinoamérica y yo me siento muy orgullosa y profundamente agradecida con todos los abogados que fueron y son mis mentores y me ayudan cada día a desarrollarme profesionalmente y alcanzar mis sueños. Poder inspirar a otras mujeres abogadas a seguir esforzándose en su realización profesional y personal me llena de satisfacción. Estoy convencida de que hacer lo que nos gusta con pasión, perseverancia y determinación es la clave. No hay excusas para detenerse y no alcanzar las metas que uno se trace, tanto en el ámbito personal como profesional.
¿Quién te animó a postular y cómo fue ese proceso?
La revista Latin Lawyer convocó a todas las abogadas de Latinoamérica a postular e hizo una encuesta entre la comunidad legal para que votaran por las profesionales del derecho que los inspiraban.
¿Cuál es la importancia de este premio?
Este esfuerzo de Latin Lawyer reconoce los aportes de las mujeres en el campo del derecho para que sean modelos a seguir. La importancia de este premio consiste en poder inspirar y ser un modelo para la siguiente generación de abogados talentosos. Yo creo en la igualdad de oportunidades para el hombre y la mujer.
¿Qué te animó a estudiar leyes?
Cuando tenía ocho años, soñaba con ser astrónoma. Pero mi abuelo me advirtió sobre el mundo de las matemáticas y la posibilidad de tener que trabajar de noche y dormir de día si escogía esta carrera. Fue entonces que la decisión de ser abogada se empezó a consolidar (risas). Siempre me gustó defender apasionadamente mis ideales, mis valores, luchar por la justicia y negociar con argumentos. Además, la mayoría de mi familia está vinculada al derecho y yo admiraba mucho a los abogados.
¿Cuál es tu especialidad en derecho?
Mi especialidad es derecho corporativo, fusiones y adquisiciones, y private equity. Mi fuerte es asesorar a inversionistas y fondos de inversión, tanto locales como extranjeros, en la compra o venta de empresas en el Perú y en el extranjero.
¿Cuáles son los mayores retos de esta especialidad?
El reto en mi especialidad es tener la visión general de toda la transacción y no descuidar los detalles. Es estar siempre un paso adelante y entender los modelos, la industria, el negocio detrás de cada transacción, así como atender en cada momento las necesidades de los clientes. Implica, asimismo, identificar los principales riesgos del negocio y plantear alternativas para mitigarlos. Solo así se puede brindar una asesoría que agregue valor a los clientes.
¿Qué experiencias laborales has tenido que te hayan marcado?
Una experiencia profesional que ha marcado mi carrera fue mi paso por la firma O’Melveny & Myers LLP, donde integré el equipo del área latinoamericana por cinco años. Allí gané mucha experiencia y realicé operaciones sofisticadas en múltiples jurisdicciones. Recuerdo haber trabajado para el gobierno de Nicaragua, que junto al Banco Mundial nos encargó llevar a cabo el proceso de privatización de la telefonía de ese país. Este era un requisito para que se condonara el 80% de la deuda externa nicaragüense y marcaba el comienzo de la modernidad en ese país. Se logró el proyecto y sentí una gran satisfacción por haber contribuido con un granito de arena en esa sociedad.
¿Qué planes tienes para el futuro?
Definitivamente, contribuir, en mi especialidad, con el desarrollo de mi país y de la sociedad. Promover a los abogados jóvenes para que sean mejores y construyan un mejor futuro para el mañana.
¿Qué valoras de la formación recibida en la Universidad de Lima?
Valoro mucho la sólida base jurídica que aprendí en la Universidad de Lima, así como el análisis lógico y práctico para resolver los problemas. Considero que el enfoque empresarial de la Universidad de Lima es muy importante para ser un profesional del siglo XXI, que se desarrolla en un mundo globalizado.
Liliana Espinosa ha participado en importantes operaciones de adquisición y venta de empresas, activos y participaciones accionarias en el Perú y el extranjero. Desde julio de 2016 es socia líder del Grupo de Práctica de M&A y Private Equity de América Latina de Baker & McKenzie. |