En el 2013 la película ¡Asu Mare!, producida por Tondero y basada en el unipersonal homónimo de su protagonista, Carlos Alcántara, batió todos los récords de taquilla en el cine peruano al llevar a más de 3 millones de espectadores a las salas. En aquel entonces, el Instituto de Investigación Científica (IDIC) de la Universidad de Lima organizó el Intermedio extraordinario “¡Asu Mare! Explicaciones detrás del boom”, donde se buscó desentrañar las razones del éxito de aquel fenómeno cinematográfico.
Han pasado dos años y ¡Asu Mare! 2, secuela de aquella exitosa película, representa también la segunda parte del fenómeno, pues ya superó el primer millón de espectadores apenas en su semana de estreno. Y así como la historia de Carlos Alcántara continúa en la pantalla grande, la discusión alrededor de este hito en la historia del cine nacional también se prolonga en la Universidad de Lima, con un nuevo conversatorio, esta vez organizado por la Facultad de Comunicación y moderado por el crítico de cine Rodrigo Bedoya Forno. Carlos Alcántara, productor y protagonista, y Miguel Valladares, productor y gerente general de Tondero, llegaron a la Sala Ventana Indiscreta para explorar los motivos del éxito de esta segunda parte y revelaron detalles de su creación.
No apta para críticos
Para empezar, los invitados explicaron cómo tomaban el éxito de esta secuela y también manifestaron cuáles consideraban que eran las principales razones del mismo. Al respecto, Carlos Alcántara dijo que, ante todo, tomaban la acogedora respuesta del público como lo hicieron en el caso de la primera parte, con mucha tranquilidad. Sobre las intenciones al hacer esta nueva película, Alcántara manifestó:
“Esta segunda parte no la hicimos pensando en la cantidad, nos parecía imposible que se superaran 3 millones de espectadores; lo que sí intentamos es hacer un trabajo más elaborado y profesional. Lo que está pasando es el resultado de la gente que ha ido y la publicidad que se hace con el boca a boca. Tengo más de 10 críticas malas para la película, pero la gente que va se ríe y la recomienda. Eso es lo que funciona. Las críticas están para los entendidos. No es una película para premios”.
Miguel Valladares, por su parte, precisó que se trataba de “una película para que el público peruano pueda entretenerse, divertirse y pasarla bien”. Dijo que recibían muchos mensajes a través de las redes sociales en los que la gente decía que la había visto con sus familias y salieron muy contentos del cine, y que ese es el mejor pago y recibimiento. Sin embargo, admitió que, a título personal, también lo entristecían las críticas, aunque sentía que la respuesta de los espectadores compensaba la situación.
Entretenimiento, identificación y nostalgia
Alcántara consideró que las razones del éxito de esta segunda parte giraban en torno a que el público se siente identificado con la historia y las situaciones, y que van con ganas de reírse de uno mismo. También recordó que la primera película respondió a un estudio de mercado y que esta vez no fue distinto, ya que se realizó un focus group que demostró que había entusiasmo y expectativa por una secuela.
Valladares, quien también destacó el componente nostálgico de las referencias a la década de los noventa, remarcó que, según los estudios, el 70% de la intención de compra de una entrada de cine responde, en el Perú, al deseo de pasarla bien. Afirmó:
“Todos esos resultados permitieron que hiciéramos una película que pretende llegar a las masas, pero ahora no para ver una película con una historia lejana a la nuestra, como las de Hollywood, sino más cercana al Perú y que nos identifique con dos décadas. No tiene más ciencia que eso y tampoco pretende ser más que eso”.
A pedido de la marca
“Estábamos con dudas frente a la idea de hacer la segunda parte, porque la primera respondía a cuatro años de un espectáculo que tiene que ver con mi vida”, confesó Carlos Alcántara sobre ¡Asu Mare! 2, y agregó:
“Los gags estaban oleados y sacramentados por el tiempo que duró el unipersonal. Para la segunda película no teníamos 'stand-up', no había hecho más. No sabíamos si hacíamos más de lo mismo o algo nuevo. Los guionistas me decían que les cuente las anécdotas y ellos tomaban nota. Esta segunda película corresponde a varios ingredientes, pero creo que gusta mucho la historia: me enamoré de una chica de otra condición social, inalcanzable para un chico de barrio, y yo empiezo a inventar cosas para agradarle, cuando a ella lo que le gustaba era mi personalidad, lo gracioso que era, mientras yo me sentía más acomplejado”.
Miguel Valladares, quien compartió que si bien es publicista de profesión ejerce la producción hace ya varios años, sostuvo que trabajaron mucho para construir la marca ¡Asu Mare!, y que consolidar una marca tan potente no era tarea fácil. “Como empresario y dueño de Tondero, les digo que no hacer una segunda parte, cuando costó tanto hacer una marca tan potente, sería tirar todo ese trabajo por la borda. Uno construye una marca para seguir viendo frutos”, detalló.
Cine comercial para el cine independiente
El fenómeno ¡Asu Mare! no solo ha llevado a millones a las salas, sino que ha encendido el debate vinculado con el cine comercial versus el cine independiente. Valladares aprovechó el conversatorio para explicar que en Tondero no solo tienen el objetivo de producir películas comerciales sino también otro tipo de cine, más de autor. Explicó que lo que han hecho es abrir una brecha distinta, al momento de buscar inversión, relacionada con la empresa privada:
“Le ofrecemos a la empresa privada un paquete de beneficios anuales que incluye no solo una película comercial sino una o dos películas comerciales y tres películas independientes, de autor, para poder no solo tener una repercusión en el público sino también en festivales y representar al Perú. Desde que la idea se planteó nos ha ido muy bien. 'El elefante desaparecido' se estrenó mundialmente en Toronto. Ahora hemos estado con 'Solos', la película de Joanna Lombardi, en Róterdam. Con la primera película de Joanna ganamos el Festival de Cine de Montreal. Magallanes ganó el Premio Cine en Construcción en el Festival de San Sebastián”.
De alguna forma, este tipo de películas funciona para alimentar la creación de filmes independientes que pueden pasearse por los festivales. Por eso, acerca de la posibilidad de una tercera parte de ¡Asu Mare!, el gerente general de Tondero fue bastante claro: “No descarto ¡Asu Mare! 3, porque si la marca en el Perú continúa teniendo la potencia que tiene, podríamos explotarla. Aunque también por otro tema más importante: si ¡Asu Mare! va a permitir, como película comercial, financiar otro tipo de cine, pues bienvenido sea”.