La muestra fotográfica Álbum familiar, la cultura del recuerdo parte del concepto de memoria para articular una serie de imágenes que nos hablan de la familia, de nuestro territorio y nuestro país.
La muestra se puede apreciar en La Galería de la Universidad de Lima. La curaduría recae en el gestor cultural Carlos Caamaño, quien ha reunido las obras de doce fotógrafos: Solange Adum, Mafe García, Astrid Jahnsen, Andrés Durán, Hans Stoll, Roberto Huarcaya, Paco Carbajal, Sergio Urday, Sebastián González, César Delgado-Wixan, Héctor Delgado y el Colectivo MR.
A continuación, Carlos nos comenta más sobre este trabajo.
¿Qué veremos en la exposición?
Principalmente, trabajos que se enfocan en la memoria, ya sea individual o colectiva, local o global. El objetivo principal es introducir el concepto “cultura del recuerdo”. Me interesa que los jóvenes tomen conciencia de ello, conozcan nuestro pasado reciente y tengan herramientas para asimilarlo a su futuro.
¿Cómo ves tú el pasado de nuestra comunidad y en qué medida la muestra lo representa con esas imágenes que tienes?
Tenemos un pasado muy cargado, con heridas aún abiertas. La muestra lo representa a través de una estrategia visual muy simbólica, pero también muy concreta. En especial con los retratos, pues en este caso muchas obras se acercan a ese género. Cada serie está acompañada de una breve reseña, lo cual es fundamental, pues ofrecemos ciertas pistas para que el mensaje quede más o menos claro. Por supuesto, también queda abierta la posibilidad de que el espectador formule sus propias conclusiones.
¿Con qué criterios elegiste los trabajos para esta muestra?
Son tres ejes los que delimitan la muestra: territorio, familia y país. Esos fueron los criterios para la selección, los cuales a su vez se interrelacionan. Trabajé con fotógrafos de distintas generaciones, técnicas y estilos, tratando de conciliar, a través de sus obras, esos tres ejes.
¿Qué te ha parecido realizar esta curaduría?
Siempre es interesante enfrentarse a un nuevo espacio expositivo, con un público distinto y con políticas propias de la institución. Es un reto. Lo más destacado en este caso es tener un público principalmente joven, estudiantil. Nada como dirigir un mensaje a los jóvenes, que son muy sensibles y abiertos a nuevas perspectivas.
¿Qué opinión tienes de los tres soportes elegidos?
La fotografía es un medio muy potente, muy cercano al público, muy humano. El soporte siempre es fotográfico, solo que hay tres modos para presentarlo: en paredes, paneles y obras suspendidas. La idea es generar un recorrido suelto, orgánico. Se ha pensado en la forma como opera el cerebro al momento de evocar los recuerdos: sin un orden, espontáneamente, divagando.
Pasando a lo personal, ¿cómo así optaste por realizarte en la curaduría como campo de expresión artística?
Me considero un gestor cultural que, además, hace curaduría. Estoy en esto hace unos ocho años. Mi formación es en comunicaciones, pero un interés particular por el arte y la cultura me llevó a enfocarme en esta especialidad. Sin duda, en mis proyectos, mi objetivo principal es el hecho comunicativo en sí mismo.
Podemos ver la muestra Álbum familiar, la cultura del recuerdo en La Galería de la Universidad de Lima, hasta el 10 de diciembre. Y también asistir a la obra de teatro Recuerdos con el señor Cárdenas en el Teatro Ulima. Ambos trabajos se encuentran unidos temáticamente. |