Fiel a sus raíces andinas y a su pasión por la música, Milena Warthon se ha convertido en una cantante y compositora que fusiona música andina con pop, reggae, rock y otros géneros. Sabe que su arte es un medio de comunicación muy fuerte, por eso cuida mucho el mensaje que da con sus letras. Este año ha grabado varias canciones que formarán parte de su primer disco. Entre estas: Agua de mar, La nena, Warmisitay, Maravilloso y Volvió a latir. Milena siguió Comunicación en la Universidad de Lima, estudios que le dieron muchas herramientas para su desempeño musical.
La base de tu música siempre es andina, ¿tienes raíces andinas?
Así es. Mi papá es de Apurímac y mi mamá de Áncash. Se conocieron cuando vinieron a Lima a estudiar, yo nací en Lima. Mi proyecto musical nace como una búsqueda de mi propia identidad, como una necesidad de encontrarme y conocer de dónde vengo. Gracias a la música he podido reconectarme con mis raíces andinas, con mis antepasados, mis abuelos, mis padres y sus historias. He escuchado mucho a mis abuelos y eso me ha permitido conocer toda la historia que ha tenido que pasar mi familia para que yo esté aquí, en este momento, cumpliendo mis sueños. Y eso es lo que trato de transmitir en cada canción, eso es lo que me inspira a hacer mi música. He viajado mucho por el interior del país, desde muy pequeña, hemos ido en el carro hasta Abancay, Apurímac y Áncash, específicamente a Yungay, que es la tierra de mi mamá. Allí he grabado un videoclip hace unos meses. He viajado muchísimo gracias a ellos.
¿Qué quieres expresar con tu música?
Cuando decides empezar con la música, siempre te haces esa pregunta: ¿Qué quieres decir? La música es un medio de comunicación muy fuerte y es necesario definir qué quieres comunicar con tus letras, con tus arreglos, con los instrumentos que eliges, porque todo comunica, hasta el traje que te pones. De allí nace la idea de hacer música fusionada con mis raíces andinas. Este proyecto ha ido madurando poco a poco, igual que yo, porque empecé a conocerme a los 17 o 18 años. Como cualquier persona, tengo mis procesos. Antes de esa edad no sabía nada de la vida. Ahora siempre busco innovar. Creo que ese es uno de mis mayores pilares. Me encanta probar cosas y también aceptar lo diferente tal y como es.
¿Cómo has ido madurando en tu música?
Mi viaje en la música ya lleva cuatro años. Los primeros fueron de experimentación, trataba de adquirir conocimientos, porque, en comparación con otros artistas, yo no tengo familia en la industria musical. Entonces, con el apoyo de mis padres, he tenido que probar muchas cosas desde cero. Sonoramente, el concepto ha ido madurando y he llegado a lo que yo llamo amor andino, un mensaje muy fuerte con el que la gente se está identificando. Es un mensaje de amor a mi raíz andina, latinoamericana, a nuestros Andes, a la comunidad en la que vivo. Se trata de abrazar nuestra identidad y aceptarnos tal y como somos. Hoy pueden escuchar mis canciones en Spotify, en YouTube, en Claro Música... estoy en todas las redes sociales. Allí pueden apreciar todo mi contenido.
¿Podrías compartir un poco de tus letras?
Este año, me he enfocado en el empoderamiento. Mi primera canción del año habla del empoderamiento femenino, en especial de la mujer andina. Warmisitay, por ejemplo, representa muy bien la esencia de la mujer andina, su dulzura, y la reivindica después de tantos años de estar olvidada, agredida y estereotipada. La escribí para mi abuela, y es una de las canciones que más ha pegado. También está Maravilloso, que habla de un empoderamiento cultural. Ahora estoy trabajando en una letra que se refiere al amor y cómo superar su pérdida. Yo escribo lo que me nace del corazón, quiero dar mensajes fuertes, porque deseo que mi música diga algo importante, que me permita entregar un granito de arena a la sociedad.
¿Cuán difícil es ser artista en el Perú?
El mundo artístico es difícil en nuestro país. Mi sueño más grande es vivir de lo que hago y dedicarme por completo a este estilo de vida que he escogido. Me apasiona hacer música y considero que estoy avanzando a buen ritmo. Ya tengo la cuarta canción del año, me falta una más. Me estoy esforzando mucho, prácticamente no he parado. Por eso, apenas salga el disco, pienso tomarme unas vacaciones.
¿Cómo logras producir tanto?
Creo que es importante tener bien desarrollado el tema emocional y tener claros los objetivos y los valores, para no perdernos. Felizmente, cuento con un equipo de trabajo que, aunque es pequeño, es excelente. Todos nos queremos mucho, el esfuerzo es de todos. Además, tengo el apoyo de mi familia, de mis hermanos, de mis papás, y eso es lo más importante.
¿Cómo empezó tu afición por la música?
Desde niña me gusta cantar. Canté en público a los 8 años y a los 13 empecé a tomar clases de canto individualmente. Pero, en general, siempre me he vinculado mucho con el arte y me ha gustado mucho bailar y hablar. Yo me inicié haciendo covers de música andina en fusión con música popular, pero el año pasado lancé mi primera canción propia, que se llama Agua de mar. Ahora acabo de presentar una nueva, con el grupo boliviano Chila Jatun. Ya solo me falta un tema para estrenar mi primer disco en marzo.
¿Por qué decidiste estudiar la Carrera de Comunicación?
Creo que estudiar la Carrera de Comunicación ha sido una de mis mejores decisiones. Terminé el colegio a los 15 años y, a esa edad, con muchas inseguridades, tenía que decidir qué iba a estudiar. Primero pensé en música, pero decidí que postularía a la Facultad de Comunicación en la Universidad de Lima, porque me daría herramientas para mi futuro en el arte, lo cual es una realidad. Mis padres me apoyaron.
¿Cómo te ayuda la Carrera de Comunicación en tu proyecto musical?
Las herramientas que he obtenido en la Carrera son un punto importante y me diferencian como artista. Durante la pandemia tuve que desenvolverme sola y usar todas las herramientas que tengo como comunicadora. Así, me pude hacer conocida en las redes sociales.
¿Cuáles son tus próximos planes en tu carrera artística?
Quiero seguir posicionándome en mi país, seguir conquistando su corazón y los corazones de los países hermanos. Hoy estamos llegando a Bolivia y, gracias a las redes sociales, sé que mucha gente de la comunidad andina me está escuchando. Obviamente, también espero lanzar mi disco, para llegar a más personas. El mayor sueño de un artista es que sus mensajes se escuchen y, para bien o para mal, seguir vigente.
¿Cómo fue tu experiencia en la Universidad de Lima?
Estoy muy agradecida con la vida por haber podido estudiar Comunicación. Creo que la Carrera me ha dado muchas herramientas para mi vida profesional. Todos los conocimientos que he adquirido los uso para mi emprendimiento, porque lo que estoy haciendo es un emprendimiento, que ahora abarca música, una marca de ropa, imagen, publicidad. Me parece que es una carrera muy completa. Me encanta porque he aprendido de todo. En un principio, me permitió diseñar mis propias portadas, tomar mis propias fotos y editar mis videos. Tengo muy bonitos recuerdos de la Universidad. He terminado el último curso el semestre pasado. Estoy muy agradecida también con mis profesores. Muchos sabían que estaba en esto de la música y me han dado su apoyo. He cumplido varias tareas hablando sobre mi propio proyecto, lo que me ha permitido profundizar y aprender estudiando lo que yo más quiero, que es mi música.
