Las coreografías, el batir de los pañuelos, la armoniosa inquietud de los pasos, el desfile de color de las vestimentas y el talento de los estudiantes de la Universidad de Lima se combinaron para transformar el Auditorio ZUM en un vehículo, que se desplazó a través de nuestra geografía para presentarnos al Perú desde su tradición palpitante. Los viajeros embarcaron a las 19.30 horas del 18 de junio. Sus boletos llevaban el título de Viva la Danza, el espectáculo de los Talleres de Danzas Peruanas de la Universidad de Lima.
Esta celebración, organizada por el Departamento de Talleres Artísticos de la Universidad de Lima, fue el resultado del arduo trabajo que llevan a cabo los miembros de los Talleres de Danzas Peruanas dedicados a difundir nuestra cultura.
Itinerario
La velada comenzó con las danzas negras, a cargo del profesor Daniel Paredes. Primero el ajetreo entusiasta de los pañuelos al compás de la zamacueca, que luego dio paso al festejo. Completaron el repertorio afro el zapateo y un homenaje a Amador Ballumbrosio.
La siguiente parada dejó en las palmas un sabor a mar y costa, con las danzas norteñas bajo la dirección del profesor Ricardo Macedo, que encendió el escenario con una estampa norteña y luego trajo un tondero, una marinera limeña y una coreografía de marinera.
Ya entrados en calor, llegó el esplendor de las danzas andinas bajo la atenta mirada del profesor Manuel Palomino. Primero la contradanza y luego la diablada. Ya acercándose al final de la noche llegó el turno de la danza de los caporales con los bailarines realizando contorsiones, giros y patadas al aire. Finalmente, la danza qachua umuto, de la Región del Cusco, cerró este viaje a través de las regiones del Perú.
