03 de Septiembre de 2014
Orientación psicológica para personas con discapacidad
En el I Jueves de Psicología del ciclo 2014-2, llevado a cabo en el Aula Magna A, la psicóloga y magíster en Orientación Vocacional María Amparo Oliver señaló que un orientador, al relacionarse con un ser humano con discapacidad, debe identificar las fortalezas, sueños y recursos con los que cuenta esta persona; dotar a los lugares e individuos de su entorno de conocimientos, estrategias y recursos que propicien una inclusión óptima; y acompañar a la persona con discapacidad en la iniciativa de percibirse a sí misma de una manera adecuada y realista, en un proceso que fomente el desarrollo de una identidad positiva y objetiva que evite tanto la sobrevaloración como la subestimación.
La expositora afirmó que el orientador tiene la misión de expandir paulatinamente los círculos de socialización de la persona con discapacidad y de ampliar su ámbito de acción de lo individual a lo grupal, familiar, social y nacional.
La psicóloga también acotó que, para favorecer la inclusión laboral de las personas excepcionales, hay que priorizar un enfoque centrado en la dignidad del ser humano; comprender a fondo los procesos psicológicos, institucionales y sociales, a fin de implementar intervenciones oportunas; y disponer de mucho tiempo y paciencia.
Asimismo, la experta animó a los asistentes, estudiantes y futuros psicólogos a vivir esta experiencia de orientación a las personas con discapacidad, dejar a un lado los prejuicios que este tema podría suscitar y sensibilizarse con un tópico que merece ser atendido para mejorar la calidad de vida de las personas excepcionales.