Susan Ticse e Iván Acosta colaboran con la ONG Movimiento Peruanos Sin Agua, que ganó el premio nacional Desafío Google.Org 2017, con un proyecto innovador para captar agua a partir de un sistema no convencional, un atrapanieblas, que recoge gotas de agua de la neblina.
Hasta el momento, se han fabricado 1500 atrapanieblas y beneficiado a más de 30 000 personas en las provincias de Tacna, Arequipa, Moquegua, Apurímac, Huancavelica, Huarochirí y Lima. La meta es construir 3000 más y contribuir a mitigar la escasez de agua.
Ambos egresados estudiaron Ingeniería Industrial en la Universidad de Lima, y, además, son primos. En las siguientes líneas nos cuentan que el mencionado trabajo ha sido seleccionado entre los quince finalistas de innovación social en la región.
¿Cómo funcionan los atrapanieblas que han fabricado para obtener agua?
Iván: La patente del atrapanieblas está en Chile, pero aquí se han realizado varias mejoras. Con el atrapanieblas original se conseguían de 100 a 200 litros de agua al día, pero aquí hemos logrado obtener de 300 a 400 litros.
¿El clima influye en esta mejora?
Iván: No, no tiene nada que ver. Lo que hicimos fue buscar un material más eficiente y que se adaptara mejor a los siete diferentes tipos de niebla que hay en Lima. Optamos por un telar llamado Raschel, originario de Estados Unidos. Si bien en Chile el sistema fue implementado para obtener agua solo para regadío, acá se ha implementado, además, para la crianza de animales domésticos y el consumo humano, y hemos cumplido todos los estándares de la Organización Mundial de la Salud. Esto lo logramos también gracias a un cloro ecológico, que no lleva mercurio y nos permite obtener agua para el consumo humano.
¿De qué se trata el concurso de Google en el que han participado con la ONG Movimiento Peruanos sin Agua?
Susan: Primero debemos comentar que Abel Rodríguez es el fundador; él es de Quillabamba, Cusco. Desde pequeño, vio la necesidad que tenían las personas de contar con agua y, aunque vino a estudiar a Lima, siempre mantuvo la inquietud de ayudar a la gente de Cusco. Por otro lado, Google, desde hace dos años, tiene una organización que trabaja el tema de responsabilidad social y organiza un concurso dirigido a las ONG con impacto social, con el fin de otorgarles fondos para llevar a cabo sus proyectos. Nosotros hemos quedado finalistas entre otras catorce ONG, de un total de 2.300 ONG que se presentaron en Latinoamérica. Y ahora, por votación del público, hemos ganado un cupo para representar al Perú en la final, en México, ante un jurado. Hemos salido ganadores junto con otros cuatro países de la región. Pero, desde ya, por haber quedado entre los catorce finalistas, recibiremos un premio de 350.000 dólares en diciembre.
¿Qué funciones cumplen ustedes dentro de la ONG?
Susan: En este momento todos estamos apoyando la campaña. Yo he aportado mucho en las redes sociales Facebook, LinkedIn, Instagram y la plataforma de Google. Y ahora estamos buscando contactarnos con la televisión.
Iván: Yo me he encargado de un tema más técnico: ver la forma de captar los recursos más eficientes y económicos para mejorar el producto de atrapanieblas y encontrar la manera más viable y sustentable de instalarlo en diversos lugares.
¿Cuántos sistemas han implementado hasta ahora?
Susan: A la fecha, tenemos 1.500 atrapanieblas instalados en Arequipa, Moquegua, Lima Áncash y Cusco.
Aparte de este proyecto, ¿en qué trabajan ustedes?
Susan: Yo tengo una empresa propia, Le Petit Fit, que brinda servicio de delivery de tortas saludables. Además, como profesional, tengo siete años de experiencia. He trabajado en Cencosud, Linio, Glaxo Smith Kline y Rímac Seguros. Siempre en las áreas de inteligencia comercial y marketing, de ahí mi familiaridad con las redes sociales y mi aporte a la ONG. Por otro lado, el próximo año me iré a estudiar una maestría a Boston.
Iván: Yo llevo cuatro años trabajando en temas de tecnología. Actualmente estoy en el área de sistemas de una empresa del Grupo Romero, Exellia. Específicamente, estoy en el área de SAP. Brindo soporte para proyectos y mejoras a distintas empresas, como Alicorp, Tramarsa y Ramsa. A veces necesito viajar para desarrollar mi trabajo. El año pasado, por ejemplo, me enviaron a Brasil, porque Alicorp adquirió una empresa de producción de pastas y fue necesario implementar estándares y políticas, además del sistema SAP. Otras veces nos piden visitar empresas del extranjero para evaluar sus procesos, reingeniería, cuellos de botella y errores, para implementar las mejoras correspondientes.
¿De qué manera consideran que la Universidad de Lima ha aportado en sus carreras?
Susan: Yo he aprendido mucho en la Universidad. Me ha dado un valor agregado en la empresa. La Ulima me ha inculcado que, si te esfuerzas, puedes lograr tus objetivos. También me ha dado una visión empresarial y global para seguir creciendo. Por otro lado, es satisfactorio para mí practicar natación en la Pre; ahí me he encontrado con otros graduados.
Iván: Yo estoy muy agradecido a la Universidad y a mi carrera, porque me han dado bastantes nociones y conocimientos que puedo aplicar en el trabajo. Hablo el mismo lenguaje de otros profesionales, me puedo identificar con ellos, entender qué quieren mejorar y cómo desean obtener ciertos resultados. También valoro el hecho de que nos inculcaran ser perseverantes y trabajar en equipo. Y también voy a la Pre a jugar vóley y fútbol.
