Universidad de Lima

En el ciclo 2021-1, la sección 425 de Proyecto de Arquitectura, de la Carrera de Arquitectura de la Universidad de Lima, tiene el encargo de diseñar una Casa de Todos destinada a adultos mayores en estado de abandono. El 26 de abril, con el objetivo de entender a este grupo de usuarios, la arquitecta argentina Viviana di Lucca ofreció la charla virtual “Tantas vejeces, tantos hogares” en este curso a cargo de Vanessa Zadel, docente Ulima y arquitecta especializada en accesibilidad y diseño universal.

Sobre el trabajo de proyección y diseño de los espacios, Di Lucca, magíster en Gerontología y Atención Centrada en la Persona por la Universidad Internacional de Valencia (España), señaló:

“No podemos realizar ningún tipo de actividad en el marco de lo que es la producción del espacio sin tener una decisión ética relacionada con la estética”.

La especialista también resaltó que la vejez está atravesada por desigualdades económicas y que es importante que los profesionales presten atención a este punto cuando busquen aportar a la calidad de vida de las personas.

Di Lucca añadió que los arquitectos deben vincular la accesibilidad con cuestiones edilicias, urbanísticas, de transporte y de comunicación, para que sea una herramienta que contribuya con el desarrollo de un hábitat inclusivo.

Además, la ponente hizo hincapié en el concepto de discapacidad, el cual es el resultado de la interacción entre personas con distintos niveles de funcionamiento y un entorno que ignora esas diferencias. Agregó que este nuevo enfoque sostiene que una parte importante de las dificultades y desventajas de las personas con discapacidad no es originada por sus propias limitaciones, sino por las carencias, los obstáculos y las barreras que existen en el entorno social.

Del mismo modo, afirmó que una vejez frágil se relaciona con la polipatología, las alteraciones cognitivas y emocionales, las necesidades básicas insatisfechas, el aislamiento social o el abuso del alcohol y las drogas.

La experta también indicó que la medición del desenvolvimiento en las actividades de la vida diaria sirve para evaluar los grados de autonomía y dependencia, y que el incremento de la expectativa de vida puede traducirse en más posibilidades de contraer enfermedades crónicas que derivan en la discapacidad. 

En otro momento, Di Lucca se refirió sobre las características a tener en cuenta en el espacio urbano que es utilizado por los adultos mayores, tales como senderos claros y seguros, señalización adecuada, equipamiento consciente, espacios en los que las actividades confluyan y no se dividan, alternativas de descanso, diferenciación entre espacio de circulación y espacio de descanso, pautas de diseño (todo lo que es sonoro para la persona ciega debe ser luminoso para la persona sorda) y los volúmenes de espacio libres de riesgo.

Asimismo, la arquitecta comentó que un proyecto habitacional enfocado en los adultos mayores debe considerar rasgos como la estimulación, la seguridad, la flexibilidad, el confort, la suavidad, los sonidos, la relación entre el interior y el exterior, entre otros aspectos. En la misma sintonía, pormenorizó los rasgos de las ayudas técnicas en los baños y de otras herramientas de apoyo.