A inicios del período académico 2015-II llegó a la Oficina de Planificación de la Universidad de Lima una solicitud de apoyo para realizar un proyecto arquitectónico para la remodelación del colegio “Padre Iluminato”, que albergaría a más de 300 niños y adolescentes de “La Ciudad de los Niños”, una casa hogar de gran extensión ubicada en el distrito de San Juan de Miraflores, que se ha dedicado desde sus orígenes al apoyo de niños que crecen en contextos de riesgo; como maltrato o abandono por parte de uno de los padres o ambos y presencia de drogas o delincuencia en el ambiente familiar.
La Oficina de Planificación, a través del área de Responsabilidad Social, realizó las coordinaciones con la Carrera de Arquitectura, a fin de atender el pedido de la Ciudad de los Niños y es así que Ramiro Pascal, entonces alumno de la carrera de Arquitectura, aceptó el reto y lo planteó como proyecto de tesis, asesorado por los docentes de la Carrera.
Inicios del reto
“Los de décimo ciclo teníamos una idea del tema de tesis e íbamos a comenzar a investigar, estaba convencido de que el proyecto debía estar ligado a la educación. Los profesores de la carrera nos propusieron este reto como proyecto de tesis y a partir de ese momento tuve una doble motivación para desarrollar y ofrecer un proyecto de calidad a un gran grupo de niños y jóvenes. El paso siguiente fue visitar La ciudad de Los Niños, donde pude conocer al hermano Gonzalo y al hermano Sergio, quienes me recibieron con mucha amabilidad, me explicaron la situación y me hicieron un tour por la casa hogar. Luego conocí el colegio “Padre Iluminato” y me di cuenta que el colegio no tiene la infraestructura adecuada para la cantidad de alumnos que alberga, demanda que crece cada año” comenta Ramiro.
Un proyecto que involucró a niños y profesores
Para el planteamiento del proyecto se contó con la participación de los niños y profesores para observar e indagar sobre las necesidades de cada uno a través de un taller participativo, mediante juegos y actividades. “Esta experiencia me permitió ver más allá de las decisiones subjetivas de diseño arquitectónico y me ayudó a llegar a un producto muy parecido a lo que los niños podían imaginar cómo su colegio ideal”, finaliza Pascal.
Luego de meses de trabajo, Ramiro planteó que el colegio sea un espacio que también ofrezca programas culturales a la comunidad. El proyecto presentado considera 33 aulas para primaria y secundaria, biblioteca, huerto, áreas deportivas, patios de juegos, talleres de cómputo y química, espacios para la práctica de danza, arte e idiomas, además de zonas para exposiciones o eventos de pequeña escala. Asimismo se ha considerado la zona de educación inicial, un auditorio y una iglesia de gran capacidad.
A la fecha, el proyecto de tesis viene siendo perfeccionado para ser sustentado en la Carrera de Arquitectura de la Universidad y la maqueta preliminar fue entregada a los hermanos de la “Ciudad de los Niños” para iniciar los trámites del financiamiento necesario para su futura ejecución.