Liderar con impacto
Con una fuerza laboral remota en crecimiento, tecnología y condiciones del mercado laboral en constante cambio, los líderes en todo el mundo nos enfrentamos a diversos retos si buscamos lograr algo más que solo los objetivos empresariales.
El impacto de la COVID-19 aceleró la digitalización y la normalización del trabajo remoto, generando cambios en el equilibrio de nuestra vida profesional y personal, cambiando, además, la percepción de los colaboradores sobre el papel del líder y el de las organizaciones en esta etapa de transformación.
¿Estamos, entonces, en capacidad de dirigir a las organizaciones hacia el futuro?
Durante este tiempo, nos hemos dado cuenta de qué tan dinámicos y resilientes somos o qué tanto nos cuesta adaptarnos a los desafíos en constante evolución. Se ha creado un nuevo marco empresarial donde ya no es suficiente solo liderar, sino hacerlo con impacto.
Liderar con impacto es ir más allá de los objetivos empresariales, es asumir una jefatura más humana, sin miedo a experimentar o expresar nuestra vulnerabilidad. Mantener una actitud positiva y ser capaces de transmitir, movilizar e impulsar a quienes se encuentran a nuestro alrededor.
Como indica uno de los últimos estudios realizados por ManpowerGroup, The Great Realization, los modelos de trabajo remoto e híbrido tienen más demanda que nunca, ya que las personas tienen la intención de conservar el lado positivo de la pandemia y remodelar su nuevo mundo laboral: equilibrar el hogar y el trabajo, valorando la flexibilidad, la interacción, la colaboración y sobre todo la conexión humana.
Según este estudio, tres de cada cuatro trabajadores quieren sentirse motivados y apasionados por su trabajo, y parte de esta motivación depende de nosotros, quienes los lideramos. Esto nos invita a pensar en algo importante antes de pretender liderar con impacto: debemos saber dirigirnos a nosotros mismos y ser fuente de inspiración para poder dirigir e inspirar a otros.
Se dice que el liderazgo no se desarrolla de arriba hacia abajo, sino que se es líder de adentro hacia afuera. Ello involucra conocernos mejor, gestionar nuestras emociones y establecer conexión con otras personas. ¿Qué podemos considerar dentro de este esquema? Dos cosas: ser y hacer.
- Ser, activando nuestra mentalidad de liderazgo y enfocándonos para entender quiénes somos y qué nos impulsa. ¿Somos adaptables, curiosos, resilientes?
- Hacer, poniendo en práctica las capacidades y comportamientos que nos llevarán a ser líderes efectivos (¿fomentamos la innovación, inspiramos con pasión, generamos confianza, empoderamos a los talentos, comunicamos asertivamente, desarrollamos a nuestros equipos, aplicamos el learnability y el upskilling?).
Hoy en día, liderar con impacto no es tarea fácil. Por ello, no hay que perder de vista cinco áreas claves como parte de nuestra gestión:
- Propósito, visión y dirección.
- Una cultura de bienestar, diversa e inclusiva.
- Desarrollo de nuestros equipos.
- Mayor compromiso.
- Resultados empresariales sostenibles.
Las organizaciones que quieran ser líderes del mañana deberán encontrar el talento que necesitan hoy: gente talentosa que no solo liderará, sino que lo hará con impacto; líderes de clase mundial que impulsarán el éxito empresarial del futuro. Este estilo de liderazgo hará que todos ganemos en el camino.
Citar esta entrada de blog (APA, 7.a edición): Nicoli Mendel, M. (9 de junio de 2022). Liderar con impacto. Blog del MBA Ulima. https://www.ulima.edu.pe/posgrado/maestrias/mba/blog/liderar-con-impacto |
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