El Centro de Estudios en Innovación Textil (Ceitex), con el apoyo de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura, llevó a cabo su primer Coloquio de la Moda, titulado “Nonwovens, desafíos y alternativas para una industria textil sostenible”. La charla, realizada el 22 de mayo en el Aula Magna T-2, estuvo a cargo de Inés Ortiz de Zevallos, vicepresidenta de Tompkins Textiles Student Council e investigadora con estudios en North Carolina State University (Estados Unidos) y Hong Kong Polytechnic University (China).
Antes del inicio de la charla, Bertha Díaz, decana de la Facultad, aseguró que desde la Universidad se viene “impulsando la innovación en el sector textil mediante la creación de espacios como este”. Esto responde a que, según Díaz, “el sector textil es uno con un gran potencial y que, sobre todo ahora que no pasa por su mejor momento, necesita el apoyo de la academia”. Asimismo, Patricia Larios, directora del Ceitex, indicó que desde el Centro se viene trabajando en la formación de profesionales de la industria textil, investigadores, expertos en desarrollo e innovación de productos y procesos, y en asistencia técnica para las empresas del sector.
“Perú tiene una industria grande, pero tiene que aprender a reaccionar ante los cambios globales”, indicó Ortiz de Zevallos. Ese cambio de paradigma, aseguró, debería empezar por entender a los textiles más allá de la moda. En esa línea, los definió como “cualquier material compuesto por fibras sintéticas o naturales que han sido unidas a través de tejidos planos, de punto o no tejidos”.
Sobre estos últimos, también llamados nonwovens, fue que la experta enfocó su conferencia. “Los nonwovens son redes de fibras unidas por procesos térmicos, mecánicos o químicos”, señaló. Y añadió que, según el tratamiento que se les dé, estos pueden adaptarse a distintas necesidades, generando productos con una alta durabilidad, con cualidades absorbentes, ignífugas o impermeables.
Ortiz de Zevallos explicó que actualmente hay cuatro procesos fundamentales que se llevan a cabo para producir este tipo de material: deposición en seco, deposición húmeda, deposición de filamentos continuos (en el caso de fibras sintéticas o largas) o meltblown. Los productos generados a partir de estos procesos, indicó, están por todos lados, aunque pasen desapercibidos, ya que los nonwovens son utilizados en las industrias de la higiene, la construcción, el cuidado personal y hasta en la automotriz.
Por último, consideró que los nonwovens pueden ser una respuesta útil ante la gran cantidad de desechos que genera la industria textil —20% de la producción anual según sus cifras—, ya que pueden ser fabricados reciclando el material, especialmente el algodón, de lo que actualmente termina en el basurero.
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