En el 2008, la Universidad de Lima fue una de las primeras instituciones de educación superior en el Perú en obtener una acreditación internacional, que certifica la buena calidad del servicio que imparte.
Acorde con su filosofía de mejora continua, desde esa fecha la Universidad viene asumiendo con disciplina diversos procesos de acreditación y reacreditación, que le han valido para alinearse con los más altos estándares internacionales de calidad educativa.
La Universidad se basa en el modelo del Instituto Internacional para el Aseguramiento de la Calidad (IAC). Dicho instituto está conformado por dos organismos internacionales de importante trayectoria en temas vinculados con el aseguramiento de la calidad en educación superior: el Centro Interuniversitario de Desarrollo (Cinda) y Quality Assurance International (QAI). Recientemente, nuestras carreras de Psicología y de Derecho terminaron su proceso de evaluación y lograron la reacreditación hasta el 2019.
El proceso
A nivel institucional, la Universidad de Lima cuenta con una reacreditación del IAC con vigencia hasta el 2017. Los procesos para su obtención fueron gestionados por la Oficina de Planificación (Oplán) de la Ulima. Detalla Elsie Bonilla, jefa de la Oplán:
“Formamos un equipo multidisciplinario, compuesto por directores de carreras, secretarios académicos, egresados, etcétera, que es el Comité de Acreditación Institucional. El objetivo era llevar a cabo una autoevaluación y lograr que nuestros procesos vayan de acuerdo con los estándares internacionales”.
Una vez realizada la autoevaluación, se envía un informe al IAC y este lo deriva a una comisión de evaluadores externos que, posteriormente, visita la Universidad para observar directamente los procesos educativos y corroborar todo lo indicado en el informe. Cuenta Elsie Bonilla:
“En esta visita también se entrevista a egresados, docentes, empleados, etcétera. El IAC toma la decisión y nos brinda las recomendaciones que considera necesarias, lo cual es lo más importante para nosotros, pues reparamos en nuestras oportunidades de mejora”.
Tras emitir sus recomendaciones el IAC, la Oplán se encarga de elaborar un plan de mejoras y, posteriormente, de hacerle un seguimiento al plan.
Para el próximo año, en el que vence la reacreditación institucional, se ha proyectado realizar nuevas gestiones para obtener una reacreditación.
Por otra parte, nuestra institución se prepara para una nueva acreditación por parte de Southern Association of Colleges and Schools (SACS). Manifiesta Bonilla:
“Estamos alistando la adecuación, que implica ajustar procedimientos e indicadores para responder a los estándares de este modelo. También venimos preparando los instrumentos y las herramientas que se necesitan para los procesos de autoevaluación y seguimiento”.
Las carreras acreditadas
En cuanto a las carreras, específicamente, hasta el momento son ocho las acreditadas: Ingeniería Industrial, Ingeniería de Sistemas, Administración, Contabilidad, Economía, Comunicación, Psicología y Derecho.
Estas dos últimas, luego de un arduo proceso de trabajo que se inició en el 2015, lograron obtener una reacreditación del IAC, con vigencia hasta el 30 de junio de 2019, que es el tiempo máximo de acreditación que se otorga.
El procedimiento se basó, principalmente, en tres dimensiones: perfil profesional y resultados (definición y logros), condiciones de operación (correspondencia con los recursos y procesos implementados para lograr dicho perfil) y capacidad de autorregulación (relacionada con los planes e implementación de mejoras a partir de la identificación de las fortalezas y debilidades).
Indica Oswaldo Hundskopf, decano de la Facultad de Derecho:
“La evaluación es global. Tenemos que demostrar que hay una actualización permanente en la malla curricular, a partir de los cambios en el panorama laboral. Cabe destacar que hay un vínculo estrecho entre el plan de estudios, el perfil del egresado y el sector empresarial”.
Además, como parte del compromiso con la mejora continua y en el marco de las sugerencias que ofrece el IAC, la Carrera de Derecho está poniendo énfasis en incentivar la investigación en los profesores y en los estudiantes. Para ello ha creado nuevos círculos de estudios y cursos de capacitación académica para los docentes.
Por otro lado, como en todos los procesos de acreditación, la Carrera de Psicología también emitió un informe al IAC. Rosana Choy, directora de la Carrera de Psicología, dice:
“Realizamos una autoevaluación para evidenciar nuestras fortalezas y espacios de oportunidad, en concordancia con los estándares internacionales fijados por la institución acreditadora. Uno de los principales desafíos fue socializar el proceso de reacreditación, dado que requería el compromiso de toda la comunidad educativa, y se pudo lograr de manera satisfactoria”.
El impacto que genera esta reacreditación es importante, porque garantiza la competencia profesional de los egresados y crea un sentimiento de confianza en relación con su formación académica. Asimismo, genera una serie de obligaciones en la Carrera, como establecer lineamientos de formación docente para fomentar la investigación en los profesores y en los alumnos, crear espacios de formación de posgrado, establecer convenios con universidades e instituciones extranjeras. Además, “estamos en busca de otras acreditaciones internacionales con la Red Internacional de Evaluadores (Riev) y con el Consejo Nacional de Acreditación de Colombia (CNA)”, anuncia Bonilla.
Enfoque de calidad
Con este enfoque de calidad educativa que rige a la Universidad de Lima, las carreras nuevas —Arquitectura, Negocios Internacionales y Marketing— están a la espera de ser evaluadas por la comisión del IAC para obtener su primera acreditación.
Y con el propósito de dar un paso adelante, las carreras de ingeniería se encuentran en evaluación para obtener la acreditación internacional de Accreditation Board for Engineering and Technology (ABET). De igual manera, las que pertenecen a la Escuela de Negocios trabajan para lograr la certificación con Association to Advance Collegiate Schools of Business (AACSB).
Las acreditaciones internacionales son necesarias para mantener una alta calidad educativa y constituyen procesos obligatorios que se emprenden una vez y se repiten de forma permanente.