Durante la pandemia, Gino Escate vio la oportunidad de abrir tiendas virtuales para emprendedores en Shopify, una de las plataformas más grandes de e-commerce. Fue así que creó su propia agencia, llamada Prende, con la que brinda servicios a clientes de diferentes países. Gino estudió Ingeniería Industrial en la Universidad de Lima.
¿Por qué decidiste emprender con tiendas online en Shopify?
Shopify es una de las mejores plataformas del mundo para e-commerce. Ahí vendía carcasas personalizadas para celulares que yo mismo fabricaba. Un día, decidí abrir una cuenta de partner en Shopify y empecé a hacer tiendas para mis clientes, a quienes ayudaba a hacer que crecieran sus emprendimientos. De pronto vino la pandemia y perdí mi trabajo. En ese momento, no había mucha oportunidad para gente como yo, que trabajaba en fábricas, en plantas o en operaciones. Entonces hacer tiendas se convirtió en mi única fuente de ingresos y, justamente, eso era lo que muchas personas necesitaban. Mis clientes aumentaron y, en determinado momento, empezaron a solicitar mis servicios también del extranjero, porque Shopify es una plataforma más conocida en otros países que aquí. Más adelante, a inicios del 2022, entré a trabajar a una agencia de Shopify. Era una de las agencias más importantes de la región, en Argentina. Allí trabajé como project manager y fue una experiencia que me sirvió mucho para conocer cómo se desarrollan este tipo de procesos. Mi interés en el tema creció, dejé el trabajo de la agencia argentina y ahora me dedico a esto con mi propia agencia, Prende. Antes, en Shopify, yo estaba en la categoría de partner, que es la que recibes cuando ingresas. Después, me llegó la invitación de Shopify para ser expert, con la que ellos mismos me recomiendan clientes.
También has hecho talleres, ¿verdad?
Así es. He hecho talleres y webinars para personas interesadas en aprender sobre e-commerce, y me han invitado de una universidad para dar una charla. Soy el único y primero en el Perú que recibe la categoría expert. Eso me motiva a seguir adelante con esto y a mostrar la plataforma a la gente, no solo a los emprendedores, sino también a los que quieren aprender. Me gustaría que Shopify se difunda más en el país. En este momento, tengo clientes de prácticamente todo el mundo y el 70 % de ellos son extranjeros, sobre todo de Estados Unidos, Canadá, Europa, y también de Latinoamérica, pero del Perú todavía son muy pocos.
Dentro de Latinoamérica, ¿dónde tienes más demanda?
Actualmente, tenemos bastante demanda en México, Colombia y Chile.
¿Por qué les conviene a tus clientes trabajar contigo?
A mí me gusta acompañar al cliente, no solo hacer la tienda, sino también ayudar a los usuarios a vender más. Muchos clientes no saben nada, solo quieren tener una tienda, entonces yo los asesoro. Si no entienden algo, nos reunimos y les explico lo que sea necesario, porque este tema de la transformación digital es muy complejo para las personas que no están relacionadas con la tecnología. Asimismo, Shopify cambia mucho. Constantemente agrega nuevas funciones y detalles que son muy importantes para nosotros como agencia y para los dueños de las tiendas. Por eso siempre tengo que ver qué hay de nuevo, estudiar, leer o ver videos que comparten. Shopify lleva a cabo un evento mundial anual en el que presenta actualizaciones. El año pasado publicó más de cien o doscientas actualizaciones. Lo mismo se espera para este año, y todo el ecosistema alrededor de Shopify está pendiente de eso.
Tú eres ingeniero industrial. ¿Cómo aprendiste sobre desarrollo de web?
He aprendido solo, a través de videos, blogs y diferente información, pero en algún momento, con la agencia, sentí que me faltaba estudiar y llevé una carrera de desarrollo que me permitió acelerar ese crecimiento. Estudié cerca de medio año.
¿Cuántas tiendas has creado?
He creado más de cincuenta tiendas. Pero hay quienes ya tienen tiendas y me llaman para que realice otros trabajos. Si sumo esas, llego a más de cien o ciento cincuenta. Las tiendas son de diferentes rubros: ropa de mujeres, mascotas, alimentos, supermercados de otros países, venta de elementos de seguridad industrial, etcétera.
¿Cómo se entera la gente de la existencia de tu empresa?
A través de las redes sociales. Uso bastante LinkedIn y estoy en otras plataformas desarrolladas para freelancers. He conseguido muchos clientes a través de esas plataformas, donde tengo una puntuación de cinco estrellas de cinco. Les gusta mi trabajo y me buscan directamente cuando necesitan una tienda nueva o tienen una consulta. También me recomiendan a otras personas. El “de boca en boca” me ha servido bastante. Llegan clientes por recomendación desde países de los que uno no pensaría, como Honduras o Emiratos Árabes Unidos. Recientemente estoy realizando trabajos para un suizo que hace tiendas para Alemania. Asimismo, uno de mis clientes más grandes es una empresa chilena que no estaba muy contenta con su tienda y me contactó. Quedó muy satisfecha, porque la creación de su tienda fue compleja, debido a que requería mucha personalización y programación. Ahora realizo un trabajo permanente con esta empresa y le brindo un paquete de mantenimiento para su tienda. En una de mis visitas a Chile, los conocí y conversé un buen rato con todo el equipo.
¿A qué te dedicabas antes?
Siempre trabajé en plantas, en planeamiento y en operaciones. Trabajé en embotelladoras, en petroleras y en empresas de cuidado de la salud y la belleza. Hacía control de la producción y planeamiento de operaciones, y estuve como coordinador de desarrollo de nuevos productos en una multinacional peruana. Siempre estuve en plantas, en empresas grandes y en comercializadoras.
¿Cómo te fue en la Universidad de Lima?
Yo estoy muy agradecido con la Universidad de Lima. Considero que me ha dado muchas herramientas, no solo para mi carrera, sino para la vida. Aunque en un principio trabajé como ingeniero industrial en áreas de ingeniería, en el camino usé herramientas para emprender cosas nuevas, ordenarme dentro del crecimiento de la agencia y definir los procesos que necesito. Apliqué ese orden lógico dentro de los procesos que debo implementar. Creo que si hubiera estudiado otra carrera no me hubiera ido tan bien. Mi carrera me ha dado las herramientas para afrontar todo lo que ha pasado en estos años. Por eso agradezco a la Universidad de Lima y la recomiendo mucho.
