Emprendimiento Ulima ganó Reto Bío del Ministerio de la Producción

Un nuevo emprendimiento Ulima ganó el Reto Bío del Programa Innóvate Perú del Ministerio de la Producción. Margarita Briceño, graduada de nuestra Carrera de Ingeniería Industrial, es la creadora de Andes Snacks, una empresa socialmente responsable dedicada al rubro de la alimentación saludable que aprovecha la biodiversidad del país.

Uno de sus productos es Ande Bar, barra energética 100% natural, sin colorantes, azúcar, derivados de la leche, preservantes ni transgénicos. Margarita y su equipo de trabajo intervienen personalmente en la cadena de valor, pues compran directamente a los agricultores, con quienes trabajan talleres y charlas que ayudan a mejorar su producción. La marca tiene un compromiso social con todos los actores del proceso de elaboración.

El Reto Bío otorga fondos para el cofinanciamiento de emprendimientos capaces de promover soluciones innovadoras y efectivas que pongan en valor nuestros recursos naturales y consideren los impactos sobre las formas de vida de los ecosistemas. Para Margarita Briceño, el premio significa un reconocimiento al esfuerzo de muchos emprendedores que buscan —mediante el cuidado del medio ambiente— hacer empresa y contribuir al desarrollo del país. Ella aseguró:

“El fondo lo estamos manejando con la incubadora Endeavor. Ellos nos brindan el acompañamiento de la inversión del dinero otorgado. Sin duda, es reconfortante que una institución del Estado valore el trabajo de los emprendedores y reconozca, a través de un premio, las buenas prácticas empresariales. Estamos desarrollando nuevos productos. Ahora nos vamos a enfocar en elaborar 'snacks' salados. El dinero también será invertido en investigación y apoyo a los agricultores”.

Actualmente, los productos de Andes Snacks se venden en tiendas naturales y especializadas. El siguiente objetivo de la marca es ingresar al mercado de los canales modernos. De momento, las barras energéticas se pueden adquirir en la red de Supermercados Peruanos y también en la misma Universidad de Lima, donde alumnos y docentes buscan opciones naturales para tener energía durante las clases.