Mientras estudiaban la Carrera de Arquitectura en la Universidad de Lima, Martha Pomasonco Alvis y Jaione Aramburu Stuart tuvieron la oportunidad de practicar en el Instituto de Investigación Científica (IDIC). Ahí desarrollaron vocación por la investigación, mientras visitaban diferentes barrios y conversaban con los pobladores acerca de sus problemas para elaborar diagnósticos y propuestas.
Estas jóvenes y destacadas profesionales desarrollaron en el 2023 el trabajo “¿Mejora de Barrios? Programas participativos de mejora de asentamientos informales en América Latina”, que presentaron en la Expo Real Estate Perú 2024.
Actualmente, Martha es jefa de prácticas en la Ulima y asistente de investigación en el Trace Lab de la Universidad de McGill, en Canadá. Jaione, por su parte, estudia un posgrado en el Politécnico de Milán, donde continúa su desarrollo como investigadora, en la Alta Escuela Politécnica.
¿En qué consistió el trabajo que presentaron en la Expo Real Estate Perú 2024?
Jaione: Es un análisis comparativo de casos de estudio exitosos de mejoramiento de barrios en Latinoamérica, y el resultado son lecciones aprendidas que deseamos proponer como una opción en Lima. Es decir, queremos mostrar estos proyectos y las razones por las que fueron exitosos para plantear su aplicación, sobre todo si se considera que las ciudades latinoamericanas tienen muchos factores en común. Estudiamos específicamente la sostenibilidad en proyectos, y en ese marco contamos con varias dimensiones: la social, la económica y la ambiental. Respecto a la dimensión social, hemos reconfirmado las ventajas del tema del diseño participativo. Los proyectos que revisamos tuvieron buenos resultados, porque las comunidades se apropiaron de ellos y apoyaron su funcionamiento. Los proyectos que funcionan hoy en día lo hacen precisamente por eso, porque la comunidad los ha sabido mantener.
Llevaron a cabo esta investigación por medio de la Beca Royal Institute of British Architects Travelling (RIBA) Norman Foster, ¿cierto?
Martha: Así es, al ganar la beca RIBA Norman Foster, obtuvimos los fondos para realizar un viaje de investigación de alrededor de dos meses por Latinoamérica, específicamente a las ciudades de México D. F., Medellín, La Paz, Santiago de Chile, Rosario y Río de Janeiro. Además, esta es la primera vez que gana un proyecto del Perú en un total de doce ediciones. Siempre ganaban países europeos, y una vez ganó Chile.
¿Cómo fue para ustedes pasar por la experiencia de realizar la presentación en la Expo Real Estate Perú 2024?
Jaione: Solo Martha realizó la exposición, porque yo curso una maestría en Italia. Todo salió muy bien. Por otro lado, es importante que haya aumentado el interés sobre estos asuntos, sobre todo porque ha tenido lugar en un evento de Real Estate, que aborda temas inmobiliarios, no de investigación.
Martha: Fue la primera vez que el tema se expuso de manera presencial. Los resultados presentados en la mesa de trabajo del evento inmobiliario destacan el ámbito social dentro de los programas de mejoramiento de barrios. Había personas de diferentes universidades, también nuestro director de carrera Enrique Bonilla. Me dieron alrededor de media hora para explicar los cinco casos de estudio, tras lo cual algunas personas se quedaron en la sala para plantear preguntas. Pienso que esta es una investigación relevante acerca de un tema que no ha sido muy estudiado. Uno de los comentarios fue que, en general, los jóvenes que participaron en este evento ampliaban el conocimiento sobre temas urbanos en Lima.
Si consideramos que este es un estudio comparativo, ¿qué diferencias encontraron con otros casos en Lima?
Martha: Los cinco casos de estudio que hemos analizado fueron proyectos que se realizaron, en primer lugar, con un plan, es decir, se llegaron a construir y finalizaron. En el caso de Lima, tenemos el proyecto Barrio Mío, que es un programa integral. Cuenta con el factor participativo, lo que es muy relevante en esta investigación, pero no se llegó a concluir.
¿Qué significa el hecho de que un programa sea integral?
Martha: Con “integral” nos referimos a que cumple con todas las variables de sostenibilidad. Es decir, no contempla únicamente la construcción de canchas y veredas, sino que también se consideran cambios de tipo social. Por ejemplo, se crean centros comunitarios y talleres para fomentar la economía local. Comprende temas económicos, sociales, ambientales y, sobre todo, el factor institucional. Un cambio integral tiene lo necesario para darle calidad de vida a las personas. Es muy importante mantener el nexo entre el Gobierno y la comunidad, y que este se mantenga en el tiempo, que haya algún promotor o líder que traslade las incomodidades o necesidades a los gobiernos y se lleve a cabo un cambio.
¿Ustedes encontraron que en otros países hay más casos de mejora de barrios que en el Perú?
Jaione: Históricamente, se han llevado a cabo proyectos y programas de mejoramiento. Actualmente, sin embargo, estos suelen enfocarse en infraestructura, es decir, en hacer losas y escaleras, lo que está muy bien, pero es necesario llevar el concepto al siguiente nivel, hacer que el proyecto sea más ambicioso o integral. Es un reto, obviamente, pero hemos visto que se hace en otras ciudades con buenos resultados. Si es posible en contextos similares, ¿por qué aquí no?
Esa es precisamente la pregunta, ¿qué hay en otros países que permite lograr un proyecto de este tipo?
Martha: Mucho depende de la voluntad política. Por ejemplo, en Medellín, Colombia, el sector público y el sector privado se asocian para llevar a cabo proyectos comunes. Hay mucha voluntad y por eso se logran hacer realidad los proyectos.
¿En qué consisten las mejoras aplicadas en los casos que han estudiado?
Jaione: Aquí la idea no es planear un proyecto desde cero, sino trabajar sobre lo que ya existe, mejorar los barrios, donde en este momento las personas no tienen buena calidad de vida, de acuerdo con sus necesidades.
¿A qué se dedica cada una de ustedes?
Jaione: Ahora mismo, realizo una maestría en Arquitectura y Diseño Urbano, en el Politécnico de Milán, en Italia. Me siento muy bien en este ambiente, mis compañeros provienen de diferentes países, porque la maestría se dicta en inglés. Son personas muy capaces y muy inteligentes, pero debo decir que me he sentido en el mismo nivel. La Universidad de Lima nos ha formado muy bien, lo que nos da la capacidad de desenvolvernos en un contexto internacional perfectamente. Además, aquí también me dedico a la investigación. Formo parte del programa de honor de la Alta Scuola Politécnica, de investigación interdisciplinaria, creado por el Politécnico de Milán y el Politécnico di Torino. Así que estoy concentrada en eso.
Martha: Yo trabajo a medio tiempo como jefa de prácticas en la Universidad de Lima, en la Carrera de Arquitectura. En mi otro medio tiempo, trabajo como asistente de investigación en el Trace Lab, en la Universidad de McGill, Canadá, de manera remota. Ahí también vemos temas de sostenibilidad y vivienda. Tener ese contacto me ha motivado a hacer una maestría en sostenibilidad en Canadá, lo que podré realizar el próximo año. He tenido la oportunidad de colaborar en diferentes proyectos y conocer distintos países. Ahora, por ejemplo, trabajo con personas de India, Reino Unido y Estados Unidos. En este trabajo también está Jaione.
¿Cómo surgió su interés por la investigación?
Martha: En mi caso, llevé el Seminario de Construcción en la Universidad, que es un curso de último ciclo en el que teníamos que afrontar una problemática actual. Mi grupo y yo escogimos un tema de educación en asentamientos informales. Comenzamos a averiguar al respecto, incluimos la necesidad de realizar mejoras, e incluso hablamos de la posibilidad de hacer colegios móviles. Luego, llegué al Instituto de Investigación Científica (IDIC) de la Universidad de Lima, donde he estado más o menos dos años y medio. Ahí tuve la oportunidad de abordar diversos temas de investigación, de realizar visitas a asentamientos informales, de comunicarme con las personas y escuchar las necesidades que tienen. Hemos sido parte de experiencias muy ricas y hemos notado que ellos están muy interesados en ser parte de un plan de mejoras.
Jaione: Comencé a practicar en el IDIC cuando estaba en sexto ciclo. Inicié con un tema sobre viviendas de emergencia, que no es lo mismo que vivienda informal. Ahí surgió mi interés por la investigación, me pareció muy interesante el trabajo de campo, y eso me llevó a hacer mi tesis de pregrado sobre mejoramiento de vivienda informal. Luego, surgió la oportunidad de colaborar junto al arquitecto Julián Jones, de la Universidad de Lima, y la investigadora externa Alejandra Acevedo. Por ese proyecto visitamos varios asentamientos en Lima.
¿Cómo les fue en la etapa universitaria?
Jaione: Estudiar Arquitectura en la Universidad de Lima me ha dado mucha satisfacción. Me han enseñado muy buenos profesores, con algunos de los cuales he tenido la oportunidad de trabajar. Eso, definitivamente, ha marcado mi carrera positivamente.
Martha: A mí, la carrera me dio disciplina para trabajar duro y de manera constante, lo que me dio la posibilidad de desarrollarme profesionalmente. Siempre llevamos un curso de taller a lo largo de los años, pero también hay otros cursos muy interesantes de temas como medioambiente y construcción y seminarios de urbanismo, que son muy relevantes y me gustaron mucho. Además, en la Universidad se fomenta mucho el trabajo en equipo, lo que es muy importante porque así se trabaja en la realidad.