02 de Julio de 2020
Equipo Ulima vuelve a Hult Prize
Un equipo de estudiantes de la Universidad de Lima postuló por segunda vez al concurso internacional de emprendimientos Hult Prize y ha logrado llegar a la etapa final de este certamen, en la que competirá contra 34 equipos de todo el mundo.
Las jóvenes emprendedoras son Valeria Boner, Alessandra Grayson, Mariana Venegas y Estefanía Papi. Ellas estudian Ingeniería Industrial en nuestra Casa de Estudios, y su proyecto, Galia Charger, es un dispositivo que transforma energía cinética en eléctrica al ponerlo en contacto con diversos equipos giratorios, como bicicletas, elípticas, caminadoras, etcétera. La energía puede utilizarse al instante o almacenarse para su posterior uso. Con Galia se puede cargar cualquier dispositivo con puerto USB. Cuenta con un motor más potente y aprovecha toda esa energía que existe y que producimos, pero que usualmente se desperdicia. Un aspecto sumamente interesante de este proyecto es que el usuario puede contabilizar su impacto mediante la conexión bluetooth de Galia con la aplicación Galia App. En ella, es posible contabilizar la energía acumulada, calorías y más.
La primera vez que participaron en Hult Prize, el concurso constaba de cuatro etapas: On Campus, Regionales, Aceleradora y Finales. Ellas ganaron la primera fase y representaron a la Universidad de Lima en el certamen regional. Luego quedaron entre los 7 primeros finalistas de un total de 70 equipos de todo el mundo. No pasaron a la final, pero aprendieron muchísimo y siguieron adelante con su emprendimiento.
Segunda oportunidad
Al cabo de un tiempo, Hult Prize decidió ofrecer otra modalidad de participación abierta al público para acceder a la etapa final del concurso, llamada Wildcard. Las alumnas Ulima aprovecharon la oportunidad y presentaron un video de 2 minutos en el que explicaban su idea de manera breve y dinámica.
Después de tres semanas de espera, finalmente recibieron la grata noticia de que fueron seleccionadas ganadoras del Wildcard en Sudamérica, junto a dos equipos de África y Europa. Ahora Galia es el segundo grupo peruano en llegar a la etapa final de este concurso.
Al respecto, Estefanía Papi señaló:
«La Aceleradora nos plantea un reto intelectual, emocional, social y laboral. Ahora tenemos el honor de decir que fuimos ganadores a nivel mundial del Wildcard para estar dentro de los 34 mejores de mil postulantes al Hult Prize. Es una experiencia espectacular e inigualable».
Mientras que Valeria Boner añadió:
«Haber llegado a esta etapa es muy importante, pues hay inversionistas de todo el mundo interesados en algunas de las ideas. Competimos contra 33 grupos de diferentes países con emprendimientos muy interesantes. Sin embargo, confiamos en nuestro proyecto y en nosotras, y nos esforzaremos al máximo para llegar a la final».
La etapa Aceleradora consta de dos subetapas. La fase en la que se encuentran ahora se denomina Preaceleradora, una modalidad virtual que consiste en conocer a los otros equipos en carrera, estrechar vínculos y compartir culturas. También se realizan presentaciones frente a mentores y expertos para recibir su feedback.
Alessandra, Estefanía, Mariana y Valeria están muy emocionadas y trabajan arduamente para hacer realidad su sueño: llegar con el mejor proyecto a la subetapa Aceleradora a finales de año.
Alessandra Grayson comentó:
«Se llevará a cabo en Ashridge House, en Londres. Tenemos muchas ganas de lograr nuestros objetivos, y sabemos que, con esfuerzo y dedicación, todo es posible. Nos hemos propuesto a llegar lejos. Lo dejaremos todo en la cancha».
Finalmente, Mariana Venegas expresó:
«Se vienen meses de arduo trabajo, pero al final todo habrá valido la pena. Será una experiencia inolvidable, llena de aprendizajes, con capacitaciones a cargo de mentores reconocidos a nivel mundial e intercambio de ideas con diferentes culturas de todo el mundo. Estamos muy emocionadas de llevar Galia Charger a otro nivel».
Este es un concurso sumamente importante, pues Hult Prize es reconocida como la aceleradora líder en emprendimientos y es auspiciada por las Naciones Unidas y la Fundación Clinton.
Este será un proceso enriquecedor para ellas, pues confían en su esfuerzo y en los resultados alcanzados.