07 de Noviembre de 2014
Ingeniero y emprendedor
Además de cumplir funciones como gerente adjunto de Adquisiciones Riesgos Pyme del BCP, Diego Callirgos, ingeniero industrial por la Universidad de Lima, también es uno de los tres socios que crearon Mesa 24/7, una startup que realiza reservas en línea en diversos restaurantes de Lima y Cusco y que ya cuenta con más de 10.000 usuarios registrados.
¿Qué los motivó a desarrollar Mesa 24/7?
A mí y a 2 de mis hermanos, que son los otros socios, nos gustan los temas tecnológicos y de negocios. Cuando decidimos crear nuestra startup, se nos ocurrieron las reservas en línea en restaurantes al considerar que, en medio del boom gastronómico, los locales siempre están llenos. Muchas veces, cuando una persona que no hizo reserva va a un restaurante, tiene que esperar aproximadamente 40 minutos para poder ocupar una mesa. Asimismo, cuando se efectúa la reserva por teléfono, a veces te dejan esperando unos 4 o 5 minutos. Cuando incubábamos la idea, dijimos: la experiencia gastronómica no empieza cuando uno llega a un restaurante, sino desde antes. Precisamente, queríamos abarcar esa parte y mejorar la experiencia del cliente. Además, durante el proceso de incubación, nos reunimos con varios chefs, cuyos comentarios e ideas nos ayudaron a mejorar el proyecto.
¿Qué resultados han logrado con Mesa 24/7?
Tenemos cerca de 10.000 usuarios registrados y un promedio de 16.000 visitas mensuales a nuestra web y apps. Empezamos con una tasa de conversión de las visitas que se vuelven reservas de 0,2 %, y hoy ya estamos en 2,1 %. Cabe resaltar que el promedio sugerido de la tasa de conversión en este tipo de proyecto es de 3 a 3,5 %. Además, a través de Mesa 24/7 se han concretado más de 2.200 reservas. Del mismo modo, hemos superado nuestra meta de llegar a 50 restaurantes afiliados a fines del 2014. Actualmente estamos trabajando con 56 restaurantes y queremos que sean más de 70 al cierre del año.
También eres gerente adjunto de Adquisiciones Riesgos Pyme del BCP. ¿En qué consisten tus funciones?
Soy el responsable de la gestión de las políticas y procesos crediticios del sector pyme. De otro lado, me encargo de la integración de las herramientas de soporte y de los modelos de calificación crediticia que nos permiten masificar nuestros productos. Además, junto con el área comercial, definimos las estrategias del negocio para el sector pyme.
¿Qué factores hacen que tus funciones en el BCP sean retadoras?
La banca pyme tiene unos 20 años en el Perú, en comparación con la banca corporativa que existe desde hace más de 100 años. Las pymes son emprendedoras y cambian de rubro de negocio con frecuencia. Por eso, sus necesidades de financiamiento no siempre son claras. En este mercado dinámico y cambiante, es habitual la adaptación a situaciones nuevas. Tenemos que estar al tanto para hacer ajustes a nuestras políticas, atender mejor a las pymes y protegerlas de los niveles de riesgo que, por las características de este sector, son mayores que otros rubros.
¿Por qué decidiste estudiar Ingeniería Industrial?
Soy una persona curiosa. Desde chico me proponía arreglar algo o mejorarlo con creatividad. Posteriormente, cuando tenía que decidirme por una carrera, me inclinaba por las especialidades que me posibilitaban hacer, ejecutar e innovar. Luego realicé consultas a otras personas y ellas me aconsejaron que estudiara Ingeniería Industrial. No me equivoqué.
¿Por qué optaste por la Universidad de Lima para completar tu formación?
Además de inculcar sólidos conocimientos técnicos, la Universidad fomenta la capacidad de hacer o gestionar negocios. Eso es un plus.
¿De qué manera los conocimientos adquiridos en la Universidad de Lima te han ayudado a desarrollar tus emprendimientos?
Estos conocimientos han sido de gran utilidad. Por ejemplo, las estructuras de la web y las apps de Mesa 24/7 están diseñadas desde un punto de vista relacionado con los procesos. En esta tarea, mi formación en Ingeniería Industrial me aportó muchísimo.
¿Qué es lo que más valoras de tu etapa de alumno?
Recuerdo a los exigentes profesores que nos traían permanentemente conocimientos nuevos o actualizados. También tengo presentes a mis amigos, a los que veo hasta hoy. Esas redes de contactos formadas en la Universidad son sumamente valiosas.