07 de Noviembre de 2013
Una economista experta en viviendas
Graduada de nuestra Carrera de Economía y gerente general de Valora, Rossana Arnaiz Figallo apunta a que esta empresa inmobiliaria brinde una gama de productos diferenciados y consolide su posicionamiento en el mercado.
Valora se mueve en un mercado competitivo. En este contexto, ¿qué retos has asumido desde la gerencia general?
Valora es la empresa inmobiliaria de Ingenieros Civiles y Contratistas Generales S. A. (ICCGSA), que lleva más de 48 años construyendo infraestructura a gran escala en todo el Perú. Como gerente general, entre mis roles figuran los de mantener el crecimiento sostenido de esta iniciativa y posicionarla aún más en un rubro específico del mercado, enfocándonos en viviendas residenciales dirigidas al segmento medio. Asimismo, algunas inversiones de Valora se están consolidando en provincias, lo que nos motiva a impulsar la construcción de condominios o de departamentos en varias regiones del país. También procuro que nuestro equipo funcione de forma óptima, consiga los mejores resultados y esté a la altura del encargo que nos han encomendado los accionistas.
Previamente, fuiste la gerente principal de Negocios Inmobiliarios de Scotiabank. ¿Qué funciones ejerciste en ese puesto?
Estuve a cargo de una unidad inmobiliaria compuesta por una banca que supervisaba los servicios de préstamos a las inmobiliarias, y también estaba bajo mi responsabilidad el producto hipotecario. El principal reto era lograr que este tenga una presencia importante en el mercado. Para nuestra satisfacción, alcanzamos un crecimiento de market share ('cuota de mercado') relevante. Teníamos una oferta de productos muy completa. Vale la pena considerar que quien va por un crédito está en pos de algo que calce con lo que necesita, ya que no todos requieren el mismo crédito hipotecario. La clave consiste en diseñar un producto a la justa medida del cliente.
Posees conocimientos y habilidades en rubros como finanzas corporativas o mercado de capitales. ¿Por qué decidiste especializarte en el nicho inmobiliario?
A veces, en los bancos se mezclan los temas: estás viendo finanzas y después tienes que supervisar una transacción del sector inmobiliario. Digamos que son oportunidades que se me han presentado, las tomé y felizmente las supe aprovechar. Y es gracias a las nociones que adquirí en finanzas corporativas o mercado de capitales que he podido estructurar muchas operaciones de una manera más eficiente o he entendido mejor cómo se manejan los contratos.
¿Tu vocación por la economía ya era marcada desde que eras estudiante?
No tenía una vocación clara, pero sabía que era buena para las matemáticas, así que visité la Universidad de Lima para indagar sobre las carreras que se dictaban ahí. Finalmente opté por Economía. Un factor que influyó en esta decisión es la crisis económica que el país padecía. Por esa época todo el mundo hablaba de economía, al punto de que el tema me interesó.
¿Qué recuerdos se te vienen a la mente de tu paso por la Universidad de Lima?
Muchas cosas: los excelentes profesores, las buenas sesiones académicas, los amigos, los trabajos en grupo, y la gran compenetración entre alumnos y docentes.