Universidad de Lima

Documentar el trabajo a través de una historia visual, idear nuevos proyectos, colaborar con otras oficinas, escuchar a las personas y diseñar estrategias son algunas de las actividades que ocupan el día a día de Jaime Mondoñedo, general communications manager para Mesoamérica en Siemens Energy México. 

Él estudió Comunicación en la Universidad de Lima e hizo prácticas profesionales en Siemens, en el Perú. Luego trabajó en la Sociedad Peruana de Hidrocarburos y en Dupree, y volvió a Siemens para seguir su desarrollo en el mundo de las comunicaciones. Desde hace tres años trabaja en Siemens Energy.

Casi toda tu carrera profesional la has hecho en Siemens. ¿Podrías comentar cómo llegaste a esta empresa?
Llegué a Siemens porque vi en el portal de empleo de la Universidad de Lima que requerían un practicante, así que me presenté y salí seleccionado para hacer mis prácticas profesionales ahí. Me fue muy bien, pero después me fui a la Sociedad Peruana de Hidrocarburos. Allí aprendí mucho y luego aposté por un tema más dinámico, y me moví a Dupree, una empresa de ventas por catálogo, donde estuve como analista de Comunicaciones. Trabajé en la parte de producción fotográfica, del diseño gráfico y de la edición del catálogo, así como en la producción de eventos. Luego se me presentó la oportunidad de volver a Siemens como especialista de Comunicaciones. Me ofrecieron un trabajo que creo que es el más importante que he hecho en toda mi carrera en Siemens: documentar el proyecto que tenemos en las Islas Galápagos y contar la historia de cómo cambiábamos y descarbonizábamos las islas.

¿Cómo están logrando eso y en qué consistió el proyecto al que te dedicaste?
El caso es así, las islas tienen que generar su propia energía, tanto para la población que vive ahí como para los turistas. Hasta hace un par de años toda la generación de energía de las Islas Galápagos era a través de petróleo, que tiene que transportarse en barcos. El problema es que a Galápagos no pueden llegar barcos grandes porque hay mucha vida marina alrededor que se puede ver afectada; además, ha habido varios casos de derrames de petróleo en el océano. Así que creamos una planta híbrida capaz de funcionar con energías renovables, tanto energía solar como un biodiésel natural obtenido de una planta que crece en Ecuador. Esto lo hicimos específicamente en isla Isabela. Yo estaba a cargo de crear esa historia visual, así como de recopilar las historias de las personas que se veían beneficiadas con este proyecto. Para eso viajé a Galápagos unas seis veces.

Luego, ¿cómo llegaste a México?
Cuando Siemens se dividió en dos, mi jefe se quedó en Siemens y a mí me nombraron gerente de Comunicaciones para Perú, Ecuador y Bolivia de Siemens Energy. Estuve más o menos un año en esa posición. Tras esto mi jefe regional me avisó que mi puesto iba a desaparecer, pero que me necesitaban en México. Ese fue un gran cambio para mí porque tuve la oportunidad de ver un mercado muy grande. Aquí soy gerente de Comunicaciones para Mesoamérica y me ocupo de México, Centroamérica y el Caribe. Participamos en eventos muy grandes, así que esta es una gran experiencia para mí. Aparte, desde hace un año soy líder del Comité Pride, que es el comité regional de diversidad e inclusión de Latinoamérica, que se ocupa de temas de la comunidad LGTBIQ+. Esto ha sido muy importante para mí, me ha permitido crecer como profesional, conocer a mucha gente, viajar y conversar con los líderes de la compañía para lograr un impacto. Nosotros estamos en más de noventa países y tenemos más de 90 000 empleados. La diversidad es parte de nosotros. Todos los días tratamos con gente de diferentes países y culturas, es decir, con diferentes formas de ver las cosas. La diversidad es lo que nos da la fuerza para seguir en el camino de la innovación y la creación.

¿Qué cambios hubo entre el trabajo que realizabas antes en el Perú y el que comenzaste a hacer en México?
Aquí mis labores aumentaron en muchos sentidos. Además de ser el gerente de Comunicaciones para Mesoamérica, tengo una responsabilidad como business partner para todos los proyectos de comunicación de la región. Es decir, apoyo a todos los países en temas de marca y branding. Aquí he tenido la oportunidad de escuchar al colaborador, entenderlo y recibir su feedback para hacer las cosas mejor. Ese es uno de los aprendizajes más grandes en la comunicación interna. Es importante llevar a cabo acciones, pero también validarlas con los empleados que reciben esas acciones. Además, me encargo de la comunicación interna, lo que es un gran reto porque mientras que en Perú éramos 250 personas y, por tanto, era más fácil transmitir el mensaje, en México manejo diferentes sedes en distintos lugares, y somos más de 1500 empleados. Preparamos un mensaje y lo personalizamos para diferentes públicos.

¿Te encargas también de las relaciones públicas? 
Manejo el PR en México, Centroamérica y el Caribe a través de varias estrategias, pero sobre todo a través del relacionamiento con los medios. También documentamos muchos de los proyectos en soporte audiovisual. En comunicación externa, organizamos eventos, manejamos las redes sociales, vemos el posicionamiento externo de la compañía, y trabajamos mucho el employer branding, que consiste en ver cómo convertimos Siemens Energy externamente en una de las mejores opciones para los candidatos a un puesto de trabajo. Competimos con muchas empresas del sector. Por ejemplo, Tesla anunció que vendrá a México y requerirá alrededor de 5000 posiciones. Nuestra tarea es mostrar lo interesante que es Siemens Energy para los nuevos candidatos. Para eso realizamos promociones en LinkedIn y trabajamos de la mano con Talent Acquisition para organizar eventos, ferias y otras actividades. Y, por supuesto, también nos ocupamos de la estrategia de comunicación y del relacionamiento con medios y entes gubernamentales, así como del posicionamiento de la empresa.

Ves la comunicación desde todos sus ángulos.
Eso me gusta mucho y es lo que aprendí en la Universidad de Lima. Me gusta usar herramientas audiovisuales para comunicar. Recientemente fui a Brasil para grabar tres proyectos y vamos a crear otras historias que nos ayuden a contar cómo hacemos lo que hacemos. Grabamos videos porque es la mejor forma de contar historias, y lo hacemos a través de las voces de los empleados porque ellos hacen que las cosas pasen. Nos gusta contarle a la gente de a pie lo que hacemos, para que comprendan conceptos como la transición energética, el cambio climático y el mismo concepto de la energía. Cuando empecé mi carrera, me encargaba de la parte audiovisual y de la social media. Y aún ahora, aunque superviso el proyecto audiovisual, me gusta involucrarme en el proceso y encontrar la manera de que el material se muestre en todo el mundo, porque estamos en Medio Oriente, Estados Unidos, Europa, Latinoamérica, y cada región tiene sus particularidades. Las herramientas audiovisuales nos facilitan la creación de contenidos universales, pero hay que ser empáticos con los contenidos. 

¿Podrías comentar uno de los retos o proyectos que haya sido muy importante para ti en los últimos años de tu carrera?
Para mí, los últimos años han sido de muchos cambios. El solo hecho de venir a México ha sido un gran reto en todo sentido. Venir de una compañía con 250 personas a otra de 1500 es muy complejo, pero la comunicación te da herramientas para responder a los desafíos. Otro proyecto importante en mi carrera ocurrió el año pasado, cuando me invitaron a presentar los Passion for Energy Awards, un evento interno para los trabajadores de Siemens Energy en el que se premia la innovación de los colaboradores en los más de noventa países donde estamos. Ahí compartí el escenario con el CEO global, pues yo estuve como presentador. Fue la primera vez que un latino ocupó ese rol, por eso luego recibí felicitaciones de los trabajadores. En cuanto a audiovisuales, el video que grabamos en Galápagos, sobre el que comenté al inicio, fue el proyecto más bonito que hemos realizado, tanto visual como conceptualmente. Hubo que pensar mucho sobre cómo contar la historia, y la mejor opción fue desde las voces de los propios pobladores a quienes se beneficiaba.

Finalmente, ¿qué te pareció estudiar en la Universidad de Lima y qué te pareció tu carrera de Comunicación?
La Universidad de Lima me dio muchas cosas, sobre todo, muy buenas herramientas. Tuve la oportunidad de probar de todo y de experimentar en diferentes áreas de la comunicación, eso me hizo el comunicador que soy actualmente, capaz de abordar diversos problemas desde diferentes aristas y resiliente para afrontar los cambios. Los profesores, además, eran muy buenos. Tengo excelentes recuerdos de esa época.