La variedad de prendas, el esfuerzo al máximo para adaptarse a los mercados locales y satisfacer sus demandas, el cumplimiento de un manual de protocolo para ofrecer a los clientes la mejor experiencia de compra, un diseño y estructura de tienda que refuerza el lazo entre la marca y los clientes, una relación cercana entre la gerencia y los empleados, una logística eficiente, entre otros puntos, son algunos factores que permiten a Zara, la marca internacional de moda y de tiendas de ropa de la multinacional española