Universidad de Lima

Lorena Dibós disfruta el contacto con las personas, facilitarles las herramientas necesarias para que se desarrollen y conversar con ellas para conocer cómo les va y cómo se les puede ayudar. Por eso considera que haber estudiado Psicología en la Universidad de Lima fue la mejor decisión que pudo tomar. Lleva siete años como gerente de Gestión y Desarrollo Humano en Financiera Oh! y siente que ahí encaja perfectamente, porque el ritmo acelerado del comercio minorista combina bien con su dinámica personalidad.

¿Cómo es tu día a día en el trabajo?
Aquí los días que más se vende son los cercanos a Navidad, Año Nuevo, Día de la Madre y Día del Padre. Cuando todos descansan, nosotros trabajamos más, porque las tiendas venden más. Todo eso también va con mi personalidad, me gusta estar pendiente de las cosas que pasan en las unidades de negocio y en las tiendas, para ver de qué manera podemos ayudar. La gente, en general, compra en las noches, los fines de semana y los días feriados, porque la mayoría trabaja, así que cuando hacemos selección de personal les advertimos todo eso. El retail es muy demandante, incluso tenemos horarios nocturnos, porque la gente de otros países puede usar su tarjeta durante la noche y, ante un inconveniente, necesita que alguien le conteste el teléfono. Además, en las tiendas hay toda una red de distribución que nunca para.

¿Estás satisfecha en tu trabajo?
Por supuesto. Yo soy muy activa y energética. He trabajado en otras industrias, quizá más tranquilas o pausadas, pero es aquí donde más tiempo llevo trabajando, me he enganchado muy bien, disfruto esta vorágine en que muchas cosas suceden en simultáneo.

¿Podrías comentar algo novedoso que hayas aplicado últimamente?
Hay muchas tendencias y tratamos de aplicarlas. Por ejemplo, ahora se trabaja mucho la autogestión, así que estamos tratando de que los colaboradores se autogestionen, que puedan realizar todos los procedimientos desde la computadora o el celular. Tenemos una aplicación de recursos humanos que es muy práctica. Antes las personas venían acá a preguntar dónde teníamos un convenio para estudiar un posgrado o cómo podían gestionar alguna otra cosa, pero ya no hace falta, porque tienen toda la información en su celular. Desde ahí, incluso, pueden gestionar un descanso médico, conseguir un descuento o un beneficio que tengamos con algún centro educativo o de otro tipo.

¿En capacitación tienen alguna novedad?
En capacitación trabajamos el microlearning, que son pastillas de aprendizaje de corta duración, de cinco o siete minutos, como máximo. El microlearning es una tendencia hoy en día y ayuda mucho, porque los cursos se dividen en temas y uno recibe esas pastillas de aprendizaje en el celular. El contenido es muy directo para facilitar la retención.

¿Viajas mucho?
Viajamos constantemente para lograr nuestros objetivos. No solo viajamos los equipos de Recursos Humanos, también todos los líderes, porque es importante saber de primera mano qué pasa en cada lugar, qué problemas tienen y cómo los podemos ayudar. Es muy importante tener una relación cara a cara con nuestros colaboradores, a fin de contarles los nuevos beneficios que tienen y las nuevas prácticas. Por supuesto, también nos apoyamos mucho en la tecnología para comunicarnos. Nuestra población es muy joven, la edad promedio es de 29 años, de manera que nos comunicamos muy bien por correo, por la página web y por redes sociales.

¿Cómo es el trabajo con tu equipo?
Tenemos cuatro áreas en Recursos Humanos. Una es Reclutamiento y Selección, que se encarga, además de las contrataciones, de la gestión de la carrera, para que la gente vaya ascendiendo y sea promocionada; tenemos unos 100 ascensos al año, porque siempre abrimos nuevas tiendas y se necesita gente. Otras áreas son Compensaciones y Administración de Personal, encargada de pagar las remuneraciones y actualizar los datos de los colaboradores; Capacitación y Desarrollo, que gestiona el desempeño; y Cultura y Bienestar, que se ocupa del clima laboral, beneficios, comunicación interna y bienestar. Cada una de estas áreas tiene una cabeza y somos 21 personas en total, en toda el área.

¿Dónde trabajabas antes?
Antes estaba en Supermercados Peruanos, que abarca Plaza Vea y Vivanda. Ahí estuve como gerente de Cultura y Talento, por cinco años. Y antes de eso he estado en empresas de diferentes sectores, como banca, industria farmacéutica, consultoría, ingeniería y construcción, y consumo masivo.

¿Has estudiado algo después de terminar la Universidad?
El año pasado llevé un curso de compensaciones en la Universidad de Lima. Me pareció fabuloso, porque compensación no solo consiste en pagar planillas, incluye muchos otros temas y hay que analizar muy bien las bandas salariales, es necesario saber que a tu talento le pagas mejor que lo que paga el mercado. Además, con la transformación digital están saliendo nuevos puestos y necesitamos saber cuánto se les paga. Fue excelente el curso, nos dieron un buen panorama y fue una gran oportunidad para hacer networking.

¿Qué te hizo inclinarte hacia la especialidad organizacional?
Debo decir que antes de elegir mi carrera, estaba en duda entre estudiar Psicología y Derecho. Terminé escogiendo Psicología y me enamoré de la carrera desde los primeros cursos, sobre todo cuando hablamos del funcionamiento del cerebro y de las neurociencias. Una vez que me tocó trabajar, probé psicología clínica y más adelante educativa, pero me di cuenta de que no eran lo mío, organizacional es lo que me gusta y va conmigo. Lo bueno es que la Universidad de Lima te muestra todas las ramas, no te encasilla en una especialidad. Además, la bolsa de trabajo de la Universidad te da facilidades para escoger entre un abanico de opciones laborales. Yo soy hincha de la Ulima, me gusta mucho mi alma mater, me encanta que mi carrera tenga una cantidad enorme de tests a nuestra disposición, así como excelentes salas de psicología para realizar pruebas. La Biblioteca de la Universidad es hermosa y los profesores muy buenos, la calidad educativa es top a nivel mundial. También me encanta que todo el tiempo se preocupe por mejorar. Me siento orgullosa de haber estudiado en la Universidad de Lima.