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Psicología para gestionar
Conducta humana, gestión de organizaciones y desarrollo de talentos son algunos temas que siempre han llamado la atención de Mariella Hidalgo, licenciada en Psicología por la Universidad de Lima y generalista de Recursos Humanos en Avon. En esta compañía, Mariella ha logrado atender tanto estos intereses como su gusto por las materias empresariales y comerciales.
Como generalista, te relacionas con una gran cantidad de áreas de Avon.
En términos generales, gestiono diferentes áreas de todos los subsistemas de Recursos Humanos de Avon, además de brindarles apoyo. Estas áreas pueden ser Reclutamiento, Selección, Vinculación de Personal, Desarrollo Organizacional, Capacitación, Bienestar, Clima Laboral y Compensación. Uno de los objetivos de mi cargo es ser un aliado estratégico de mis clientes. Es decir, me desempeño como business partner o socia de negocios, y soy un nexo entre la organización y los empleados.
Avon es una transnacional y su casa matriz está en los Estados Unidos. ¿De qué manera este rasgo influye en tus labores?
En Latinoamérica, Avon forma grupos con distintos países. Estas agrupaciones se llaman clústeres. Perú es miembro del clúster andino, que también incluye a Colombia, Ecuador y Venezuela. En este marco, mis funciones se alinean con los objetivos e indicaciones de la matriz. Al mismo tiempo, mis funciones son coordinadas por las cabezas del clúster que están en Colombia. Lo interesante de ser parte de un clúster es que tengo contacto con la gestión de otros mercados. Además, como socia de negocio, replico los proyectos propuestos por la casa matriz en el mercado peruano. Aquí el reto consiste en ajustar la estrategia del negocio a la realidad del Perú y en proponer mejoras según las expectativas de los trabajadores.
¿Qué logros profesionales destacas desde que laboras en Avon?
Considero que es un logro haber empezado mi desarrollo profesional en Avon. Comencé como practicante de Recursos Humanos en Avon en el 2010, cuando era estudiante de Psicología de los últimos ciclos. Durante el año que fui practicante, aprendí sobre las funciones y los alcances de Recursos Humanos, así como conocí procesos y personas. En esta etapa, descubrí que el cargo de generalista me interesaba. Luego me retiré de la compañía, gané experiencia profesional en otros mercados y regresé a Avon como generalista de Recursos Humanos en enero de este año.
En el 2014, un gran reto fue liderar la implementación y lanzamiento de la Universidad Avon, que tiene como objetivo ofrecer a los asociados la mejor experiencia de aprendizaje y de desarrollo de competencias según el modelo de liderazgo de Avon. La Universidad Avon se basa en un modelo pedagógico de enfoque constructivista, orientado hacia el aprendizaje del adulto que es fomentado por una red de formadores internos que planean, diseñan, transfieren y actualizan los cursos que están alineados con nuestra cadena de valor.
¿Cuáles son los aprendizajes que más valoras en Avon?
Además de familiarizarme con las áreas de todos los subsistemas de Recursos Humanos, aprendí sobre planillas y nóminas. También realizo informes sobre estos rubros con la asistencia de una contadora y veo temas de presupuesto. Como se puede apreciar, en Avon cumplo funciones que van más allá de los estereotipos de un psicólogo. Avon tiene un sentido de apertura que permite a sus profesionales desarrollarse en más de un ámbito.
¿Qué tareas y conocimientos adquiridos en la Universidad de Lima te han servido para desempeñarte a nivel profesional?
Toda la base de la psicología ha sido de una gran utilidad, porque uno tiene que entender la conducta humana para trabajar con personas. Asimismo, lo aprendido en el rubro clínico de la Carrera de Psicología me ha servido en mi trabajo en Recursos Humanos, ya que debes aproximarte a las personas de una manera integral. También valoro los cursos educativos e instruccionales que llevé. Gracias a ellos, aprendí a armar una malla curricular, y eso fue muy útil en mis tareas para lanzar la Universidad Avon. Sin duda, esta visión global y amplia de la Carrera de Psicología de la Universidad de Lima es valiosa.
¿Qué razones te impulsaron a estudiar Psicología?
Me gusta la psicología desde el colegio. Los test vocacionales decían que yo iba a ser psicóloga. Me interesa mucho la conducta humana. Cuando estaba en la carrera, desde un comienzo sabía que quería seguir psicología organizacional, ya que soy una persona dinámica, me interesan los temas comerciales, no me cuesta trabajar con números, quería laborar en una empresa y proponer mejoras. Siento que en Avon estoy en el lugar correcto. Aquí aplico lo que estudié en la Universidad.
¿Qué es lo que más recuerdas de tu estadía en la Universidad de Lima?
La relación con mis amigos era de mucha confianza y cercanía. Eso lo valoro. Coincidíamos en más de un curso y con dos de esos amigos hice todos los trabajos grupales a lo largo de la carrera. De otro lado, conocí profesores de un gran nivel. La relación con ellos era horizontal. Ellos siempre estaban dispuestos a atendernos, a escucharnos y a conversar.