Universidad de Lima

La etapa de cuarentena que vivimos este año motivó a Alessio del Pozo a producir un corto animado que reflejara ese momento y la extraña sensación de estar aislados, incluso de las personas que más cerca están de uno. Su trabajo, Dimensiones, ganó el premio del jurado en el Festival Long Distance, en Estados Unidos.

También obtuvo la mención del jurado en la edición Desde Casa del Festival Luz del Desierto, de Argentina, además de haber sido seleccionado en otros festivales.

Alessio también ha ganado otros premios por sus cortos. Él estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Egresó en el verano de este año y ahora trabaja en el estudio de animación Apus. Está preparando su tesis, que es otro cortometraje, y en el corto plazo se propone ganar un premio Dafo.

¿De qué se trata la historia de tu corto de animación que ganó el premio del jurado en el Festival Long Distance?
Es una reflexión escrita en verso sobre las sensaciones que generaba el distanciamiento social durante la cuarentena. En esa época todos estábamos aislados en nuestras casas. Si tenías un vecino al frente, a solo treinta metros, no tenías ningún contacto con él. Así que el corto refleja este hecho y es un monólogo del protagonista, el cual se escucha en una voz en off. Las imágenes que vemos no están directamente relacionadas con lo que se dice, pero existe una relación conceptual entre voz e imágenes.

¿Tú escribiste el guion y produjiste también?
Así es. Cuando estábamos en la cuarentena me puse a pensar en una historia que pudiera desarrollar en poco tiempo, que no tuviera mucha animación y que tuviera pocos planos. Fui planteando la idea visualmente y la realicé en un fin de semana, luego la presenté en el festival de Long Distance y después en otros. Este no es mi primer corto animado, tengo otros que también han sido seleccionados para festivales y han ganado premios, pero esta es la primera vez que gano un premio internacional.

¿Qué otros cortos has hecho que hayan sido premiados?
Uno de mis últimos cortometrajes de animación se llama Ella. Lo hice a partir de un poema de mi amiga Brenda Lucía Báscones. Lo presentamos a algunos festivales y nos seleccionaron en varios de ellos. En el Perú lo seleccionaron para Cortos de Vista y ganamos el premio a la mejor ficción nacional. Estuvimos los tres días del festival. Fue una oportunidad para conocer a mucha gente y para ver unos cortos muy buenos. La verdad es que todos eran increíbles. Así que el último día, cuando me anunciaron ganador, me quedé helado. Fue una sorpresa increíble. Ese mismo año también se presentó en el Festival Internacional de Animación Ajayu, y ganamos como mejor animación nacional. Este corto se puede ver en la aplicación de streaming del festival de Cortos de Vista, CDV Play.

¿Dibujas manualmente o en la computadora?
Lo hago con una tableta gráfica sobre la que dibujo directamente en la computadora. Una parte fundamental en este trabajo es el planeamiento, porque así defines exactamente qué dibujar y no animas algo que tal vez no sea tan importante en la narrativa.

¿Qué programas usas?
Dibujo en TVPaint, un programa de animación tradicional, y hago los fondos en Photoshop. Luego junto todo en Adobe After Effects. Puedes dibujar veinticuatro o doce fotogramas por segundo. Cuando dibujas doce, la animación es menos fluida. Yo hago doce por segundo, para poder hacer cortos de mayor duración. Por otro lado, me esfuerzo en enriquecer los fondos y los encuadres para compensar la animación poco fluida. Al principio hacía cortos de muy poca duración y, poco a poco, fui haciéndolos más largos.

Cuando ingresaste a Comunicación, ¿tenías claro que querías especializarte en animación?
Sí, lo tenía claro. Pero cuando salí del colegio yo no pensaba estudiar Comunicación. Primero ingresé a Biología en la Universidad Nacional Agraria La Molina. Después ingresé a la Universidad de Lima para estudiar Ingeniería Industrial. Dos años después, terminé en Comunicación.

¿Por qué decidiste pasarte a Comunicación?
En un verano llevé un curso de dibujo digital en Comunicación, y eso me animó. Conocí a algunas personas que estaban en el medio y me di cuenta de que era posible trabajar en esto. Así que, después de pensarlo bastante, me pasé a Comunicación. Me gustan las ciencias, pero quería hacer animación. Fue una decisión muy difícil de tomar, porque estaba abandonando una carrera en la que tenía muchas posibilidades laborales. Pero me fue bien con el cambio, descubrí que en animación también hay muchas posibilidades de conseguir trabajo, sea en forma independiente como en una empresa. Ahora trabajo en un estudio de animación llamado Apus y tengo otros proyectos personales. Además, estoy por presentar mi tesis, que es otro corto animado. Y tengo un proyecto de serie, quedé finalista en Dafo este año, me ganó el jefe de mi estudio. Así que el próximo año volveré a postular.

¿Qué tipo de trabajos haces en Apus?
De todo. Hago animación, producción, he hecho concept art para una película llamada Vigilados, en animación 2D. Concept art se trata de dibujar los escenarios de una película en una etapa de preproducción. Por ejemplo, si se trata de una ciudad, hay que pensar cómo hacerla. Vigilados ha ganado el premio de Dafo para preproducción, luego para la producción de la película y ya se mostró en Annecy, donde hay un festival muy grande de animación.

¿Qué quisieras lograr en el futuro?
Quiero seguir produciendo contenidos y cortometrajes, construir más proyectos, ganar el premio Dafo para comenzar a producir el piloto. Quisiera seguir produciendo cortometrajes y hacer otros proyectos. También he pensado estudiar animación o llevar una maestría en guion.

¿Valió la pena cambiarte de dos carreras para, finalmente, llegar a Comunicación en la Universidad de Lima?
Por supuesto, me siento feliz por la elección tomada. La Carrera me dio un panorama amplio del mundo audiovisual, tanto a nivel teórico como práctico. Eso es muy útil al momento de realizar un proyecto, porque tienes una idea de todos los procesos que involucra una producción. Además me encantaron cursos como Teoría del Cine, en primer lugar. Pero también Géneros Audiovisuales, Historia del Cine, Dirección de Actores, etcétera. Aunque yo me dedique a la animación, todo ese bagaje me resulta muy útil para realizar y para concebir nuevos proyectos. Pensaba, y sigo pensando, que es muy importante aprender la narrativa y llevar todos los cursos de la Carrera. Como todo arte, la animación tiene una dimensión técnica importante, de modo que para hacer algo sólido se necesitan los fundamentos, que es lo que aprendí en la Universidad.