Universidad de Lima

Eduardo Rengifo, Natalia Mavila y Alejandra Romero, estudiantes de la Facultad de Psicología de la Universidad de Lima, participaron el 28 de septiembre en una jornada más de las actividades de voluntariado que llevan a cabo en el Programa de Educación Básica Laboral “La Inmaculada” (Pebal), ubicado en la urbanización Pamplona Alta, en el distrito de San Juan de Miraflores. Esta institución, fundada por la Compañía de Jesús en 1978, brinda ayuda a las comunidades vulnerables y a personas de escasos recursos en materia de capacitación laboral técnica, servicios educativos no escolarizados, asesoría jurídica, y asistencia médica y psicológica.

La Facultad de Psicología Ulima, a través del área de Proyectos Sociales, y gracias a la participación voluntaria de docentes y alumnos, desarrolla un trabajo abocado a ofrecer servicios gratuitos de evaluación, consejería y psicoterapia, y desarrolla iniciativas de prevención y de promoción de la salud mental en Pebal “La Inmaculada”. En esta oportunidad, nuestros alumnos realizaron el taller grupal “Manejando la ansiedad y depresión” y brindaron una charla sobre “Estilos de aprendizaje y hábitos de estudio”. Ambas actividades se dirigieron a jóvenes y a padres de familia del distrito, y fueron supervisadas por Alvaro Okumura, docente de nuestra Carrera de Psicología y coordinador del proyecto.

En el taller, Eduardo, Natalia y Alejandra explicaron a los participantes en qué consisten los trastornos de la ansiedad y de la depresión. Asimismo, dialogaron con los asistentes acerca del análisis funcional, una estrategia de evaluación utilizada para que las personas aprendan a reconocer las emociones que se manifiestan en cada uno de ellos a raíz de una situación determinada. De este modo, nuestros estudiantes enseñaron al público asistente a identificar cuál es la naturaleza de cada suceso y los sentimientos que provocan. Así, mediante un intercambio de ideas y experiencias, los participantes comprendieron que la herramienta del análisis funcional les ayudará a entender que cada acción, pensamiento o emoción promueve consecuencias en su salud mental y en sus vidas.

Posteriormente, en la charla, los voluntarios Ulima expusieron acerca de los estilos de aprendizaje y de la importancia de que cada individuo identifique cuál es el más idóneo para sí mismo. Explicaron en qué consiste el aprendizaje visual, auditivo y kinestésico. Luego, orientaron a los asistentes sobre los mejores hábitos de estudio y les recomendaron contar con un ambiente cómodo y libre de distracciones; organizar horarios de trabajo y descanso; utilizar materiales de apoyo como resúmenes, esquemas y videos; e identificar las ideas principales, que es una tarea esencial.

Alejandra Romero comentó la buena predisposición de los asistentes a lo largo de la sesión:

“Definitivamente, tuvieron una actitud muy cercana y participativa, eso nos encantó porque llevamos el taller de forma satisfactoria. Además, tratamos de motivarlos y de hacer que se sintieran en un lugar cómodo para que se expresaran, dado que la ansiedad y la depresión son temas muy delicados”.

Igualmente, manifestó cómo ha sido su experiencia a lo largo de este programa de voluntariado:

“He tenido una experiencia muy gratificante, he compartido tiempo con personas con distintos problemas y de diferentes entornos, y me he involucrado con situaciones muy diversas a las que les he hecho seguimiento. Hay casos de depresión, de ansiedad y de problemas de estado de ánimo. Este voluntariado me ha ayudado mucho en la práctica, porque los conocimientos adquiridos en la Universidad los he volcado a un contexto real y he abordado distintas situaciones tanto en las terapias como en las intervenciones”.