10 de Febrero de 2017

Reconocen a profesores Ulima por convertir energía eólica en eléctrica

Los profesores de la Universidad de Lima Víctor Sotelo y Fabrizio Paredes han recibido un reconocimiento internacional por haber creado una turbina que convierte energía eólica (del viento, energía renovable) en energía eléctrica. Recientemente, recibieron un diploma de honor al mérito profesional por parte del Colegio de Ingenieros Mecánicos, Electricistas y Químicos de Honduras (CIMEQH), por la presentación de su trabajo de investigación “Fabricación de un generador universal para una turbina eólica”, utilizando análisis de elementos finitos FEA y maquinado CNC, en el Congreso Panamericano de Ingeniería Mecánica, Eléctrica, Industrial y Ramas Afines (Copimera) 2015.

La línea de investigación de ambos profesores es la energía eléctrica y, en este marco, invirtieron tres años en investigar y, finalmente, diseñar un controlador para un generador eléctrico hecho a medida, de acuerdo con las características deseadas para una turbina eólica.

“Después de varias pruebas, fabricamos la turbina, abarcando todo el aspecto mecánico, aerodinámico y eléctrico. Evolucionado este proyecto, nos concentramos en el software, para determinar la manera óptima de controlar esa turbina y captar la mayor energía posible del viento”, comenta el profesor Sotelo. Por su parte, el profesor Paredes recuerda que “lo primero que se diseñó fue un generador. Hicimos las aspas con fibra de carbono y de vidrio, epoxi aeronáutico. Eso tomó más o menos 280 horas de trabajo. Luego se fabricó la torre de 6,2 metros de altura, en el Edificio W de la Universidad. Y nuestra velocidad promedio de viento por segundo alcanzó los 5 metros”.

Lo que se presentó en Copimera fue la forma más moderna de diseñar un generador con un motor eléctrico. Antiguamente se hacía casi todo en forma manual, hoy en día se utiliza el análisis de elementos finitos, que es una manera de simular lo que se va diseñando. Al terminar el diseño se puede probar y luego optimizar. “Estas técnicas generan conocimiento. Se crea una base de conocimiento para transferir a los estudiantes y a investigadores”. Y no solo eso. Los docentes han elaborado papers que presentarán en revistas internacionales de prestigio para continuar la transferencia de conocimiento.

Expandiendo el conocimiento

Algo muy interesante es a que Fabrizio Paredes lo han contactado dos personas interesadas en fabricar este tipo de tecnología. Una pertenece a una empresa peruana y otra forma parte de un grupo de estudiantes extranjeros que vendrán al Perú y están interesados en realizar obra social. Para ello necesitan conocer los costos y otros detalles. Asimismo, comenta Sotelo, en los congresos a los que han asistido se les han acercado muchos ingenieros y una empresa interesada en la parte del motor. Todos les preguntan con qué equipos cuentan, qué software han usado, entre otras cosas. Obviamente, las herramientas empleadas para hacer el prototipo son costosas. Sin embargo, “cuando se producen de manera masiva, resulta mucho menos costoso. Lo importante de este caso es que falta energía eléctrica en tantas partes del Perú y los equipos para brindarla siempre son importados, pese a que en este país tenemos otras calidades de viento y de sol. Nosotros podemos hacer un equipo apropiado para el país”, expresa Sotelo.

El objetivo que se plantea este trabajo es resolver problemas sociales. Por eso a los docentes les gustaría volcar ese conocimiento y ofrecerlo a la sociedad, a empresas y a organizaciones interesadas. Además del diploma recibido por esta investigación, obtuvieron las medallas del CIMEQH-Honduras de Orden al Mérito de Ingeniería y Orden Panamericana al Mérito Profesional. Si bien el congreso se realizó en octubre del 2015, la entrega del diploma y las medallas se llevó a cabo el año pasado en Lima, de manos del ingeniero Jorge Galio Navarro, presidente del comité internacional del congreso, en una ceremonia especial realizada en el local del Colegio de Ingenieros del Perú. Cabe señalar que este trabajo forma parte de un proyecto de investigación del Instituto de Investigación Científica (IDIC) de la Universidad de Lima. El IDIC financió el proyecto, les proporcionó los materiales necesarios para llevarlo a cabo y tramitó los permisos necesarios para la construcción de la torre. Esta investigación realizada por los profesores Víctor Sotelo y Fabrizio Paredes, reconocida internacionalmente, es un motivo de orgullo para esta Casa de Estudios y un incentivo para continuar apoyando la producción científica, en beneficio de la sociedad.