11 de Julio de 2019

Experiencias, aprendizajes y lecciones de emprendimientos peruanos

Los cofundadores de tres empresas locales expusieron sus experiencias en una nueva jornada del ciclo de conferencias “El emprendimiento en tiempos de innovación”, realizada el 4 de julio en el Aula Magna T-4. Ellos fueron Alexia Harten, de Peru Well Served, Emilio Fantozzi, de Mandü, y Nicolás Aramburú, de Mambo. El evento fue organizado por la Escuela de Posgrado de la Universidad de Lima, Asesori y Premium Perú.

Peru Well Served es una agencia de turismo especializada en experiencias gastronómicas en nuestro país, Mandü busca transformar la gestión del talento de las organizaciones a través de la tecnología y Mambo se define como una consultora de transformación abocada, sobre todo, a dos tipos de proyectos: la transformación cultural (se interviene en los rituales y creencias de una organización para cambiar los comportamientos) y la transformación del negocio (las propuestas de valor deben incorporar no solamente al cliente en su diseño, sino también a la tecnología, el medio ambiente y la sociedad).

Además de relatar los orígenes de sus iniciativas, los ponentes se refirieron a la perseverancia y la pasión para desarrollar y mejorar sus propuestas, así como a las dificultades a las que se han enfrentado, por lo que la paciencia es un rasgo indispensable en cualquier emprendedor.

Alexia Harten señaló que los cambios que retan a un emprendedor son constantes y que este debe contar con la disposición para analizar si su proyecto se encamina por la ruta adecuada y replantear sus objetivos. Asimismo, ella indicó que, a veces, las leyes no avanzan con la misma velocidad de las innovaciones y el desarrollo de las tecnologías. Al respecto, Harten contó que, en un principio, el sector público exigía que Peru Well Served contara con una oficina para poder inscribirse y formalizarse, lo que no sintonizaba con la esencia de ser una agencia digital de este emprendimiento, hasta que tras varias reuniones los fundadores de la empresa pudieron convencer a las autoridades y lograron su inscripción.

Por su parte, Emilio Fantozzi comentó que fue todo un reto aprender a comunicar de una manera adecuada lo que se propone Mandü y superar la barrera de la incomprensión de los clientes, pero que el esfuerzo y la perseverancia traen recompensas que justifican la inversión.

En tanto, Nicolás Aramburú se explayó sobre los aprendizajes en diversos procesos, tales como la demora de los pagos por parte de los clientes. Él indicó que este problema es aún más sensible para una empresa chica, por lo que los emprendedores deben tomar previsiones para que sus iniciativas puedan continuar con sus rumbos.