26 de Octubre de 2015

Una noche de intercambio cultural entre Perú e India

La Universidad de Lima y la Embajada de la India en el Perú hicieron posible la visita de la bailarina T. Reddi Lakshmi, quien se presentó el 15 de octubre en el Auditorio Central de la Ulima. Los asistentes, miembros de la comunidad universitaria y público en general, disfrutaron de la danza de esta artista que dejó su carrera corporativa —tiene un MBA en marketing— para dedicarse a cultivar el kuchipudi, uno de los nueve estilos clásicos de danza que se practican en la India. Además de ella, diversos bailarines peruanos presentaron números que exploraban distintos tipos de baile de ese país.

Óscar Quezada, rector de la Universidad de Lima; Ajay Shinde, encargado de negocios de la Embajada de la India en Perú y Bolivia; y Pramod Mittal, presidente de la Asociación Amistad Perú-India, abrieron el acto encendiendo una lámpara de aceite, un ritual indio tradicional para traer paz y prosperidad.

Acto seguido, las bailarinas Deena Swapnil, Radha Mendoza y Sonia Bocángel presentaron “Vandanam”, un número que mezclaba los estilos odissi, kathak y bharatanatyam. La antesala fue una excelente preparación para el público, que se iba acostumbrando a algunos de los elementos característicos de estas danzas orientales: cascabeles sonando al compás de la música, vestuario colorido y movimientos que simulan anarquía pero que requieren total precisión.

Entonces, llegó el turno de T. Reddi Lakshmi, quien llegó acompañada de cinco músicos, entre ellos Jayarama Rao, maestro de la artista y leyenda viva del kuchipudi, esta vez a cargo del natuvangam, un pequeño instrumento similar a los platillos. 

La presentación tuvo tres partes: “Jaya Durge”, “Aaj Aaye Shyam Mohana” y “Shiva Tarangam”. Cada danza implicaba una carga religiosa y cultural muy fuerte, pues sus pasos contaban historias protagonizadas por deidades hindúes. La admiración del público al desempeño de Lakshmi no fue solo por lo que simbolizaba, sino también por su ejecución. La artista sorprendió cuando danzó sobre una charola cargando un jarrón de agua con la cabeza, sin que esto le restase precisión o velocidad a sus movimientos, incluyendo su mirada, protagonista de su propia coreografía.

Con fuertes aplausos del público, T. Reddi Lakshmi terminó su presentación agradeciendo a los funcionarios de la embajada. Además, añadió que se sintió “privilegiada al estar en la Universidad de Lima”.

No obstante, la velada no terminó allí. Radha Mendoza volvió al escenario junto a la bailarina tradicional peruana Marisol Ponce y presentaron una fusión de zapateo negro peruano con zapateo bharatanatyam. Esa no sería la única mezcla, dado que las agrupaciones Bollywood Perú y Dashain Perú presentaron coreografías basadas en el cine popular de la India, cuyas bandas sonoras combinan el ritmo frenético de la música carnática con techno y letras en inglés. Los primeros, bailaron canciones de la megaproducción Chennai Express y luego ofrecieron una combinación de coreografías de diversas películas de Bollywood. Los segundos, por su parte, recrearon las bodas de la India, en un enfrentamiento entre hombres y mujeres que evocaba a musicales occidentales como Grease.

Tras casi dos horas de espectáculo, los representantes de la Embajada de la India condecoraron a los artistas presentes y se mostraron muy agradecidos con el recibimiento del público. Pramod Mittal, presidente de la Asociación Amistad Perú-India, destacó el intercambio cultural presenciado en el evento y el bello auditorio en el que se desarrolló. Todos quedaron con ganas de una nueva presentación.